Dólar

El dólar sigue bajando y en el mercado temen que Macri vuelva al atraso cambiario para las elecciones

Se descuenta que la banda cambiaria evolucionará a un menor ritmo a partir de 2019.

La marcha del dólar hacia el límite inferior de la banda cambiaria parece inexorable. Este viernes, el mayorista retrocedió otros veinte centavos y quedó a las puertas de perforar la zona de no intervención establecida por el Banco Central.

Ante este escenario, en el mercado temen que el gobierno se vea tentado a atrasar el tipo de cambio para enfrentar las próximas elecciones con un mejor clima social y se vuelvan a repetir los efectos de una menor competitividad externa que golpee a las empresas exportadoras.

"En los últimos cuatro años electorales, el dólar se movió por atrás de los salarios y hubo atraso cambiario. No me cabe duda que el gobierno volverá a intentar transitar hacia esa dirección", aseguró a LPO el director de Eco Go Federico Furiase.

La apuesta no es novedosa. Con un dólar planchado, la inflación evolucionaría por debajo de los salarios y provocaría un aumento del consumo para traccionar el nivel de actividad económica. La contrapartida sería una profundización del rojo en los números de la cuenta corriente, ya sea por el lado de las importaciones como por mayores viajes al exterior.

"Seguramente vayamos hacia un dólar apreciado, pero me da la sensación de que a corto plazo están muy acotados por las metas monetarias y además van a intentar hacerlo más cercano a las elecciones para maximizar el nivel de actividad. Eso lógicamente te traerá nuevamente problemas en la balanza comercial y en el déficit de turismo", indicó Hernan Hirsc, economista y director de FyE Consult.

El Central celebró el sobrecumplimiento de la meta de base monetaria 

En la segunda quincena de diciembre se empezará a despejar esa duda cuando se reúna el Comité de Política Monetaria y defina el ritmo de actualización de la banda cambiaria en 2019. Si bien desde el Banco Central le aseguraron a este medio que todavía no tienen certezas de cuál será este número, en el mercado ya dan por sentado que avanzará a un ritmo mucho menor al 3% definido para el 2018, generando un dólar más barato.

Para Furiase, el mayor peligro de esta estrategia será el riesgo de una menor recaudación y un perjuicio en las utilidades empresariales. "Puede generar un problema fiscal porque estarías recaudando con una inflación más baja y teniendo gastos de jubilaciones atados a la inflación anterior que era mucho más alta. Por lo tanto, no conviene una desaceleración inflacionaria muy acelerada", indicó el economista.

"A su vez, el problema de aumentar los salarios en un contexto sin liquidez por la política de emisión monetaria cero, no te permite tener el combustible para que las empresas puedan trasladar las paritarias a precios. En consecuencia, el ajuste termina siendo en los márgenes de las empresas", agregó.

No obstante, para que eso ocurra el gobierno debería conseguir una baja del riesgo país para que los dólares financieros que ingresaron en las últimas jornadas se mantengan durante todo el 2019, cosa que parece un verdadero desafío ante la incertidumbre electoral que usualmente ocasiona fuga de capitales.

Mientras tanto, este viernes la divisa cerró a $35,49 en el segmento mayorista y el Banco Central volvió a bajar la tasa de interés. En una nueva subasta de Leliq, adjudicó $139.380 millones a una tasa promedio de 68,519%, 28 puntos básicos debajo de la última licitación y 500 puntos básicos menos que hace tres semanas.