Finanzas

Se viene la primavera de Caputo, el verano será caliente

El Central está tomando medidas coyunturales, que invitan a pensar la llegada de semanas cálidas en materia financiera.

 El Banco Central viene tomando medidas estructurales y coyunturales, que nos invitan a pensar que podríamos vivir unas semanas cálidas en materia financiera.

Vamos por las medidas, a saber:

1) El BCRA recompro U$S 800 millones en el mercado de futuro, lo que le permitiría embolsar una gran ganancia, vendió dólares con el tipo de cambio mucho más alto que el actual, y los recompro más abajo. Esto lo logro gracias a subir los encajes del 20 al 28%, y poner la tasa a niveles superiores al 50% anual. La economía real sufrió, y será difícil revertir la caída en el corto plazo.

2) El Stock de lebac está disminuyendo, y se están pasando los vencimientos de 30 a 60 dais para descomprimir el vencimiento de lebac del próximo 15 de agosto, que ascendería a $ 500.000 millones por ahora.

3) El Tesoro está pagando al BCRA deuda que contraía en concepto de adelantos transitorios y letras intransferibles, esto implicara una mayor deuda del Tesoro, pero un Banco Central más transparente y con menos deuda cruzada con la nación. Esto no lo llevo adelante Federico Sturzenegger, que mantuvo el statu quo en este tema, bajo la actual administración se busca independizar al Banco Central del Tesoro Nacional, aunque las medidas financieras se tomen en consonancia y coordinadas con el gobierno nacional.

4) El BCRA vende todos los días U$S 100 millones, mientras este dinero este vigente, el dólar seguirá calmo, el problema comenzara a aparecer, cuando este dinero se acabe. Seguramente el BCRA estaría buscando fuentes de financiamiento para reponer este capital. Sin embargo, lo que alarma es que las reservas reales no superen los U$S 12.000 millones. Esta cuota de U$S 100 millones diarios, culminaría a mediados de octubre.

5) El 7 de agosto el BCRA bajaría la tasa de política monetaria del 40% a niveles del 38% anual, como una señal de que comenzaría un proceso de baja en la tasa de interés.

Con estas cinco medidas las autoridades del Banco Central van a surfear la coyuntura, sin embargo, para que el tipo de cambio se estabilice en el tiempo se necesitarían el ingreso genuino de dólares, ya sea por mayores inversiones al país, como un saldo positivo de la balanza comercial. También deberíamos observar una menor demanda de dólares para atesoramiento por parte de la población, y paralelamente menos dólares gastados en turismo.

Parecería que a corto plazo algunas cosas no van a suceder.

En primer lugar, resulta difícil que ingresen capitales para inversión de largo plazo en la actual coyuntura económica y política argentina. El presidente está cayendo en las encuestas, estamos a un año de las elecciones presidenciales primarias (11 de agosto de 2019), y la probable candidata Cristina Fernandez de Kirchner crece en las encuestas presidenciales.

En segundo lugar, la balanza comercial argentina sigue siendo deficitaria, producto de las menores exportaciones de productos primarios dada la sequía que opero sobre nuestro país en la cosecha pasada. Con menos productos para exportar casi que el déficit de balanza comercial no bajaría de los U$S 6.000 millones.

En tercer lugar, al gobierno le resulta difícil conseguir financiamiento en el exterior a tasas razonables. El riesgo país sigue en los 550 puntos, y debería descender a los 400 puntos para salir a buscar financiamiento a una tasa del 7% anual a 10 años, que es alta, pero no tanto como el 8,5% anual al que conseguiríamos en la actualidad. Sin baja de riesgo país, volverán a faltarle dólares al gobierno.

En cuarto lugar, el proceso de dolarización de carteras sigue vigente en el mercado, los argentinos cada vez que se aproximan a una elección presidencial recurren al dólar como resguardo de valor. Los más osados se compran una propiedad, pero para que ello suceda les tiene que sobrar dólares.

En quinto lugar, la noticia positiva es que hay menos viajes al exterior, con un dólar de $ 28,00 se ha encarecido muchísimo salir de la Argentina, con lo cual estimamos que el déficit de turismo que se ubicaba en torno de los U$S 660 millones por mes, podría bajar a niveles de U$S 400 millones en el corto plazo.

En sexto lugar, el gobierno no tendría problemas de cumplir las metas con el FMI para el 30 de septiembre y 30 de diciembre, con lo cual estaría garantizado el ingreso de U$S 6.000 millones hasta fin de año.

Conclusión

. - El gobierno tiene una coyuntura favorable en lo financiero hasta fin de octubre y primeros días de noviembre. Para fin de año, debería impulsar a la suba al dólar para licuar gastos, y ajustar a la baja la salida de fondos proveniente de importaciones y turismo de verano, con lo cual no vemos al tipo de cambio en los valores actuales para diciembre, creemos que estaremos con un tipo de cambio por encima de $ 30,00. Esto ayudara a acomodar las cuentas públicas, cumplir las metas con el FMI e ir surfeando la coyuntura económica, que hasta diciembre de 2018 vera una fuerte caída de actividad. Las expectativas de mejora están centradas en el primer trimestre del año 2019, si solo sí, en la Argentina llegan nuevas inversiones, el gobierno consigue más financiamiento en el exterior, se detiene la dolarización de carteras, vamos a un escenario de cosecha record, con precios de soja, maíz y trigo en suba. Parecen muchas condicionalidades juntas, para lograr un buen resultado.