México

El plan de López Obrador de invertir USD 24 mil millones en refinerías alarma al mercado

Calificadoras de riesgo le advirtieron que el plan complicaría las finanzas de Pemex y la industria petrolera.

El presidente electo de México, Andrés Manuel López Obrador, confirmó su plan para invertir 24 mil millones de dólares en construir y modernizar refinerías, a pesar de las advertencias del mercado sobre posibles consecuencias financieras.

El plan de AMLO implica la construcción de dos refinerías nuevas para la petrolera Pemex y la modernización de otras seis. En el mercado estiman que la cuenta total sería de unos 24 mil millones y no está claro cómo sería la financiación.

Diversos especialistas han recordado la endeble salud financiera de Pemex, por lo que descartan que los recursos pudieran provenir de las arcas de la petrolera. Y si acaso se apostara por la inversión privada, aseguran que en el mercado las refinerías no son el negocio más atractivo para los inversionistas petroleros.

A pesar de eso, los futuros encargados del plan energético de México insisten en que a través de este despliegue se podrá tener autosuficiencia energética y se mantendrá un control de precios en los hidrocarburos.

Lo que también parece desoír López Obrador son las advertencias del mercado. Las principales calificadoras de riesgo como Moody's o Standard and Poor's ya advirtieron que el programa energético será un factor clave para las decisiones que tomen en el futuro sobre la perspectiva de la economía mexicana.

En el caso de Standard and Poor's, sus analistas explicaron en su último reporte que el desarrollo del sector energético tendrá un impacto sobre el crecimiento el PBI y por tanto, advirtieron que tendrá "un impacto importante de largo plazo sobre la economía y potencialmente sobre nuestra calificación crediticia". Ello, incluye el rol de Pemex.

Pero con más detalle, Moody's, ahondó en sus preocupaciones, pues por el momento, consideran que los tres ejes primordiales de esta política energética del tabasqueño "perjudicarían a Pemex y a la industria local de petróleo y gas, tanto en el corto como en el largo plazo".

En cuanto a las refinerías advierten que representa un riesgo para la petrolera. Un temor latente es que, como ha pasado en otras latitudes, ocurran excesos que puedan aumentar los costos de construcción en un 50%, lo que implicaría una inversión de hasta $ 24 mil millones.

Una constante pregunta es, ¿de dónde vendría esa inversión? Como explicó su analista, Nyma Almeida a LPO, la salud financiera de la petrolera mexicana no posibilita que los recursos provengan de ella. "Pemex tiene solo una capacidad limitada para invertir incluso en el negocio de Exploración y Producción, que desde nuestro punto de vista es el más rentable, gastando solo un promedio de $ 4.9 mil millones anuales en 2016-17", explicó.

Pero si esta inversión viniera de privados, también es un riesgo, pues duda que pueda existir suficiente interés por el nivel de rentabilidad del proyecto y porque, asegura, el mercado ahora está prefiriendo las fuentes de energía renovables.

"Si Pemex requiere de recursos es probable que acuda al Estado y ahí es donde habrá que ver el nivel de interferencia. Eso podría afectar nuestra calificación", explicó Almeida.