Provincia

Bajo presión, Vidal negocia con Macri el "límite" del ajuste en la provincia

El gobierno pretende una baja del gasto de 43 mil millones. La gobernadora está dispuesta a colaborar, pero sin comprometer la viabilidad de la provincia.

María Eugenia Vidal decidió simplificar la discusión quemantiene con el gobierno nacional sobre el tamaño del ajuste que le piden a laprovincia. En lugar de discutir sobre el eventual traspaso de Aysa, Edesur,Edenor y el subsidio al transporte, prefirió centrarse sobre el monto real delajuste.

Es que cada uno de esos renglones tiene complejidadestécnicas que vuelven fractal la discusión por separado. Como reveló LPO, eltraspaso de las eléctricas no sólo espanta a los accionistas del exterior deEdesur y Edenor, sino que requiere un diseño normativo y corporativo muycomplejo, que incluye la creación de nuevos entes de control y empresas detransporte eléctrico.

AySA plantea desafíos incluso mayores si se pretendedividirla en una compañía para Capital y otra para la provincia y un debate sobreel perfil de la transferencia: "¿Se transfiere sólo el déficit operativo, sinel costo de las obras? ¿Con o sin el costo de mantenimiento?", son algunos delos interrogantes. Lo mismo ocurre con el transporte: En la provincia hay tressistemas, interurbano, provincial y municipal, ¿Qué subsidios debería absorberla provincia?.

La gobernadora venía manejando un estimado de reducción delgasto del orden de los 23 mil millones, pero en la última reunión con Macri y susministros, Dujovne le pidió que el esfuerzo alcance los 43 mil millones. Nadamenos que lo que recibió este año por actualización del Fondo del Conurbano.

La gobernadora venía trabajando sobre un ajuste de unos 23 mil millones de pesos, pero Dujovne estiró el pedido hasta 43 mil millones. "Acá está en juego el Gobierno" dramatizó Macri.

El borrador del ajuste que maneja Dujovne se completa con 18mil millones de ahorro de la Ciudad de Buenos Aires y otros 80 mil millones delresto de las provincias, con un sacudón fuerte a las promociones patagónicas,como anticipó LPO. Con esto se llegaría a 140 mil millones y la Naciónrecortaría por su lado 160 mil millones, para llegar a los 300 milcomprometidos con el FMI.

Como se ve, es a Vidal a quien le piden el mayor esfuerzo,en el peor momento: Como reveló este medio, el año que viene la provinciaempieza a afrontar vencimientos fuertes de capital e intereses de la deudaexterna que tomo la gestión de la gobernadora, que podrían rondar los 80 milmillones.

En medio del ajuste, Vidal enfrenta vencimientos de deuda por mas de $80.000 milones

"En el 2020 la provincia por primera vez en décadas entrabaen equilibrio fiscal gracias a la recuperación que hicimos del dinero del Fondodel Conurbano. Ahora quiero saber si nos están pidiendo que posterguemos eseobjetivo o la provincia vuelve a ser inviable", sintetiza la gobernadora.

La situación la encuentra además con la paritaria docentesin cerrar y con la dificultad objetiva para proyectar los ingresos de este añopor la volatilidad de las principales variables macro (inflación, crecimiento,etc). "Todavía no tenemos consolidada la recaudación de Junio", reconocen en laprovincia.

El tema forma parte de las tensiones que por ahora se vivenal interior de Cambiemos, donde el Gobierno necesita cerrar entre los propiossu parte del ajuste, para después ir a la negociación con el peronismo, que setraduzca en un acuerdo para el Presupuesto del año que viene.

Los ministros de Economía de Vidal, Larreta y los otros tres gobernadores de Cambiemos(Gerardo Morales de Jujuy, Alfredo Cornejo de Mendoza y Gustavo Valdez deCorrientes) vienen negociando con Frigerio y Dujovne los contornos y lasecuencia del ajuste.

El ministro de Economía bonaerense, Hernán Lacunza, negocia la magnitud del ajuste en la provincia.

Pero la verdad es que el ajuste se juega en el inmensoterritorio que maneja Vidal, que concentra el 40 por ciento de la población delpaís y que tiene en el Conurbano la situación social más delicada. "No hayprovincia ni municipios sin Nación viable, pero al revés también", explica lagobernadora, que está dispuesta a colaborar en el ajuste, pero sabe que en ladefinición del límite tolerable se juega la gobernabilidad.

"Sería una mala salida cubrir el bache fiscal con suba de impuestos"

"Acá está en juego el Gobierno", dramatiza por su lado Macri.Pero su gobierno también depende que el Conurbano pueda transitar el ajusteestabilizado. Por eso, Vidal reforzó las ayudas sociales, reabrió losdescuentos del 50% del Bapro y esta semana lanzará una nueva tanda de medidasde contención. "Tenemos el territorio muy impactado por la inflación y lastasas altas sobre las Pymes, hay que sostener como sea a los sectores bajos yla clase media", pide la gobernadora.

Pero no es fácil. En la provincia ya se siente el recorte ala obra pública de la Nación, a la que se suma la decisión del propio gobiernoprovincial de no abrir ninguna obra nueva. "Lo que queda de acá a fin de año esdoloroso, como soy optimista espero que el 2019 próximo salgamos de larecesión", se resigna Vidal en la intimidad y mezcla análisis con deseo: "Creo que la gente cuando vote el año que viene va a evaluar todo lo que hicimos en estos cuatro años, no sólo este período difícil".