Mercados

El problema ahora son las Letes

Preocupa al gobierno el poco interés del mercado por renovar las Letras del Tesoro. El supermartes se ha dolarizado.

Semana más tranquila en lo cambiario. El BCRA logró el objetivo planteado de corto plazo. La orden presidencial había sido concreta. Freezar al dólar. En los libros, convenía seguir dejando correr a la moneda norteamericana, licuando el festival de Lebac que recibiera Luis Caputo como pesada herencia. 

La suba de los encajes y la consecuente suba de tasas tuvieron el efecto deseado. También las ventas de dólares que está efectuando el Banco Nación de manera sigilosa. Pero nada es gratis. Ya abundan los datos que muestran la caída de la actividad. Créditos, industria, venta de combustibles, patentamientos son los ejemplos semanales. 

La duda pasa ahora por la duración de la recesión. Serán dos o tres trimestres. La cosecha del 2019 pondrá fin en lo estadístico a la recesión modelo 2018. Pero para ello resta una eternidad. Hay muchos interrogantes de corto plazo. Contra todo lo supuesto, es más importante el vencimiento de las Letras del Tesoro el martes próximo que el de las Lebac del 17 del corriente. 

Con la tasa de Lebacs en 62% hubo poco interés en el mercado por pasarse a Letes 

El supermartes ahora se ha dolarizado. Es que en las ultimas licitaciones de Letras del Tesoro llamó la atención que el equipo económico no haya podido renovar el 100% de los vencimientos. El público inversor quería tener cerca a los billetes norteamericanos. No a tres o doce meses de plazo. Por ello es que en las anteriores licitaciones, sólo se hayan renovado hasta el 60-70% de los vencimientos. Este es el verdadero test del mercado.

El equipo económico, especialmente Luis Caputo, está al tanto de las amenazas de corto plazo. Se viene la semana próxima la emisión de un nuevo bono dual o binorma. Paga lo invertido e intereses en pesos o bien en dólares si llegara el tipo de cambio dispararse. Es una invitación a que vuelvan fondos del exterior con una opción gratis que se otorga en este bono dual para reconvertirlo al dólar. Con ello podrán compensar el faltante que dejen las Letras del Tesoro. Habrá otra emisión de un bono en pesos que los bancos suscribirán para cumplir con la suba de encajes que rige la semana del 16 de julio.

Ahora es más importante el vencimiento de las Letras del Tesoro que las Lebacs, el supermartes se ha dolarizado. Preocupa al Gobierno que en las últimas renovaciones sólo se cubrió el 60-70% de los vencimientos.

El problema pasa por la duración de las supertasas en pesos. Los heridos ya comienzan a aparecer al costado del camino con las entradas de algunas empresas en concurso. Para la renovación de las Lebac del 17 de julio se estima que la tasa rondará el 45% anual. Bajarla será muy complejo por el alto stock de Lebac en circulación. Tampoco es prioridad del BCRA. Funcionarios de la entidad monetaria aseguraron a La Política Online que la prioridad es estabilizar el tipo de cambio. Y luego cumplir con el financiamiento, dado que los dólares del FMI no alcanzan para todo. El riesgo país en torno a los 580 puntos es una muestra de las incipientes dudas en la plaza local.

Una cuestión interesante es lo que sucede con la tasa del corredor de pases del BCRA, de 37% para pases pasivos y de 43% para los activos. Lo que sucede es que los bancos van a pedirle fondos al BCRA al 43% y niega los desembolsos. Es como que la tasa de política monetaria del BCRA es ficticia. No se aplica. No pasaría nada salvo que hay un título de deuda en circulación, el Bono de Política Monetaria que paga según ese rendimiento. El "BoPoMo" paradójicamente sería para sus tenedores un papel como los indexados por el CER en la era Kirchner. Los variables por las que ajustan son ficticias. Por ello es que se espera que la semana próxima desde el BCRA corrijan este fenómeno, poniendo la tasa de política monetaria en línea con las Lebac o Letras de Liquidez. 

La guerra comercial de Trump con China

El informe del "Oso", el ejecutivo de banca privada que se esconde detrás de se seudónimo, vino con un alto nivel de acidez. Se concentra en lo que pasa en EE.UU., México y la Argentina. Estos son los puntos principales de su tradicional envío a clientes: 

1) Lo primero pasa por la guerra comercial entre EE.UU. y China, se empezaron a aplicar los aranceles: salieron los datos de empleo norteamericano mejores a los previstos por el mercado; una nota de color es que hubo rumores que JP Morgan y ICBC estarían por comprar el devaluado, como la selección de su país, Deutsche Bank; antes de que abriera el mercado, el JP Morgan desmintió la versión.

 2) En Mexico, luego del arrasador triunfo de Lopez Obrador, lo que vemos es la famosa luna de miel en la que los mercados quieren escuchar que todo está OK; los empresarios dicen estar más cerca de AMLO; hay que esperar a su asunción y la formación de su gabinete con sus primeras medidas; estaría atento en los próximos meses; por ahora es una grata sorpresa.

 3) En Argentina, realmente si vamos tres meses para atrás y vemos donde estamos hoy, han hecho todo mal; cuando uno trata de frenar una corrida, trata de defender reservas o el tipo de cambio o la tasa de interés; acá se fueron 10.0000 millones de dólares de reservas; la tasa está al doble de lo que estaba y el dólar 50 por ciento arriba; insisten ahora en canjear Lebac por Letes a un 12 meses pero siguen manteniendo una tasa de interés que congela la economía; les recomendaría descomprimir el corto plazo, las Lebac llevarlas a 5 años; hay que dejar ir al dólar y no frenarlo con una tasa tan elevada; los manuales dicen que tras lo sucedido hay que cambiar gabinete por la pérdida de credibilidad; es muy difícil recuperarla; ese sería un plus.