Negri se sumó a las denuncias de intimidaciones por votar la ley del aborto
Mario Negri comunicó anoche por Facebook que votaría a favor del aborto y esta mañana se encontró con una sorpresa: su teléfono personal fue viralizado con imágenes de sus familiares con la consigna de escracharlo.
"Jamás se había violado mi intimidad de esa forma. Se han metido hasta con mis nietos. Un verdadero católico no amenaza ni desea el mal. No apoyo el aborto solo creo que la criminalización de la mujer fracasó. Por suerte hay personas más tolerantes", posteó el jefe de bloque UCR, que supo batallar en épocas de dictadura militar.
No fue un caso aislado, durante las últimas semanas varios diputados que hacían público su apoyo al aborto sufrían escraches en redes sociales e intimidaciones personales.
El tucumano Facundo Garretón recibió amenazas de muerte y parecen que tuvieron efecto: hace unos días le dijo a sus pares que votaba a favor, pero ahora no atiende el teléfono.
Olga Rista, radical y de Córdoba, también sufrió mensajes intimidatorios en su domicilio, pero igual fue a sesionar con pañuelo verde. ¿Quiénes integran este grupo de tareas ecrachador?
Sobran especulaciones y con el correr de los días aparecieron pistas. "Hay algún vínculo con el poder real porque tienen información personal muy fácil", sostenían e hicieron bien su trabajo porque el hostigamiento se mezcló con la presión real de la Iglesia en el interior del país.
El domingo hubo marchas de hasta 15 mil personas en ciudades no tan pobladas con fotos de diputados bajo el lema de asesino. Al entrerriano Julio Solanas le bastó ver las caminatas por Paraná para confirmar que vota en contra.
Es que esas movilizaciones tuvieron mucho de peronismo tradicional, con la ONG "Peronistas x la Vida", que armó su grupo de whatsapp de casi 2 mil militantes y figuras como Jorge Capitanich, Hugo Moyano y Carlos Menem.
Los gobernadores peronistas se pusieron de ese lado y por estas horas se están haciendo sentir. Gildo Infrán doblegó la presión a sus diputados Inés Lotto y Gustavo Fernández Patri, del kirchnerismo, que ayer le habían dicho a sus pares que apoyarían la ley.
Lotto la pasó mal: no conforme con el hostigamiento por redes sociales, le pintaron la casa.
El PJ católico también logró que José Luis Gioja y su protegida Sandra Castro votaran en contra de la ley y sean de los pocos de su bloque sin pañuelo verde.
Silvia Lospennato y Daniel Lipovetzky, los macristas que promueven la ley, hablaban estos días de varios compañeros temerosos de estos escraches. También en el FpV, donde muchos indecisos cerraron sus celulares y redes hartos de las presiones.
Lo curioso fue que los abortistas no lograron o no quisieron mensajear a los teléfonos personales y en las últimas semanas su presión fue menor. "Desde que confirmé que voto en contra no paro de recibir mensajes de agradecimiento", confesó a LPO uno de los últimos en rechazar la ley, teléfono en mano y ya casi sin batería de tanto leer mensajes desconocidos.