La francesa Decaux, interesada en quedarse con las bicis porteñas
Horacio Rodríguez Larreta se contactó con la empresa Decaux, la más grande del mundo en publicidad en la vía pública, para invitarla a competir por la explotación del sistema de bicicletas de la Ciudad.
En su último viaje a París, el jefe de gobierno porteño cenó en la casa de uno de los herederos de Jean Claude Decaux, que creó un imperio que factura 3200 millones de dólares al año.
Larreta le habló de la ley que sancionó la Legislatura para concesionar el sistema de bicis por 10 años -con una posible prórroga de 7- y del negocio que podía encontrar, que no es el de las bicicletas sino el de la publicidad.
La francesa viene de perder la licitación del bicing de la capital de su país en manos de la española Moventia en mayo del año pasado, de manera que está buscando otras ciudades emblemáticas -como Buenos Aires- para desplegarlo y eventualmente reutilizar las bicicletas que le quedaron. Lo intentó hacer en Bogotá, pero los colombianos le exigieron que utilice bicicletas nuevas.
Ricardo Klahr, dueño de Vía Subte ya tomó contacto con Grupo Vía, los que controlan la publicidad del Subte. Este empresario de muy buena llegada a la gestión larretista, también deberá enfrentar pronto la licitación del servicio que le concesionaron cuando se licite la operación del Subte.
Por otro lado, la apertura de sobres de la licitación del bicing porteño está prevista para el próximo 8 de junio, donde se conocerán las empresas que competirán para quedarse con la concesión de las bicis.
El sistema será gratuito para sus usuarios durante el plazo de la concesión y otro ítem prevé la continuidad del personal que actualmente opera el sistema estatal. Para que el servicio continúe siendo gratuito, la empresa que gane la licitación contará con 550 espacios publicitarios -denominados "chupetes"- en la vía pública.
Con ese mecanismo, Larreta apunta al autofinanciamiento del sistema para que el usuario no tenga impacto económico y la Ciudad pague menos cediendo a través de la cesión de la publicidad y el sponsoreo, que en definitiva es lo que tienta a las empresas que se anotaron en la licitación. La ganadora se someterá a una auditoría trimestral para informar sus ingresos.
Un "chupete" explotado por Decaux en Dusselford, Alemania.
Decaux es la favorita porque en París logró lo que parece imposible en Buenos Aires: que el servicio de bicis Vélib' tenga altos niveles de reposición de stock de bicis anclado en un monitoreo digital al instante, una herramienta impensada para la postal de bicicleteros vacíos de algunos barrios porteños.
Esa es una de las preocupaciones principales del gobierno de la Ciudad, a tal punto que casi duplicarán el stock actual de bicis. Las bicicletas que actualmente están en uso y quedarán desafectadas del servicio cuando empiece a operar el concesionario podrán ser distribuidas a escuelas secundarias de la Ciudad para el uso por parte de los alumnos. Se calcula que al menos son unas 2.500 unidades. El nuevo concesionario tendrá que aportar 4000 bicicletas nuevas que serán repartidas en 400 estaciones distribuidas en todas las comunas.
En el gobierno porteño confirmaron el encuentro de Larreta con Decaux, aunque aclararon que hubo contactos con al menos 15 empresas de diversas ciudades del mundo que están interesadas en la licitación.
Como las empresas que tienen la concesión del mobiliario urbano protestaron por miedo a perder terreno en el negocio y porque ya habían perdido espacios de publicidad con la construcción de metrobuses, en la ley se agregó un artículo para prorrogarles los contratos por hasta un máximo de 7 años.