Senado

El mensaje de Macri empujó la unidad del peronismo y dicen tener los votos para la ley de tarifas

El enojó que provocó la chicana con Cristina achicó el margen a los peronistas que dudaban.

Para terminar de una vez con las presiones, Miguel Pichetto adelantó la reunión de bloque para el mediodía de este viernes y garantizó el apoyo de sus pares a la ley que limita los tarifazos de servicios públicos, que de cumplirse con los pronósticos de la conducción del bloque peronista este miércoles sería sancionada.

"La votan todos, hasta Urtubey", repetían varios de los senadores al salir del encuentro, en referencia al hermano del gobernador de Salta, Rodolfo Urtubey, que por la mañana había sugerido su rechazo a la iniciativa, pero para no quedar pegado al Gobierno votaría a favor en general y en disidencia en particular.

Actuaría igual su primo, el catamarqueño Dalmacio Mera, y el jujeño Guillermo Snopek y el correntino Carlos Espínola. La semana pasada, este grupo firmó el dictamen en disidencia y permitieron un festejo en el despacho de Rogelio Frigerio.

Pichetto adelantó la reunión de bloque para evitar presiones de los gobernadores. Con su bloque, el progresismo, santiagueños y puntanos sancionaría la ley. Macri la vetaría al día siguiente.  

Pero Mauricio Macri eliminó cualquier posibilidad de acuerdo: no le permitió al ministro del Interior sentarse a negociar con Pichetto y ayer dinamitó cualquier acercamiento con su mensaje grabado, ideado por Marcos Peña antes de viajar a Cuba.

El mensaje en el que volvió a intentar medrar políticamente con La Grieta, Macri buscó polarizar con Cristina y ubicó al sector que lidera Pichetto yendo a la saga de la ex presidenta. El enojo de los peronistas escaló al punto que hubo diálogos fuertes con Frigerio.

Pichetto tenía motivos para apurar la reunión de bloque: muchos gobernadores empezaron a recibir presiones severas para ablandar a sus senadores e irían subiendo de tono a la largo del día.

Uno de los más acuciados era Alfredo Luenzo, de Chubut, donde su gobernador Mariano Arcioni tiene problemas para pagar los aguinaldos y se encuentra en una delicadísima situación. "Si bien no es una ley buena, vamos a acompañar. Macri terminó cohesionando a la oposición", anunció al salir.

"Tratar a los senadores como chicos, si estás con mamá o con papá, no es bueno. No ayudó la declaración del presidente. Han insistido con otra propuesta, la que reduce el 50% del IVA a las tarifas, pero es absolutamente insuficiente", completó Luenzo, blanqueando la bronca en el bloque de Pichetto con la movida del mensaje de Macri.

El senador Luenzo junto al macrista De Angeli.

Pichetto puede alcanzar una mayoría con sus 24 votos, los 9 del FpV-PJ (kirchnerismo), los dos puntanos y los dos del Progresismo.

Si Carlos Menem no aparece, se compensaría con la ayuda de al menos dos de los tres santiagueños, que son Blanca Porcel de Riccobelli; Ada Itúrrez de Cappellini y Gerardo Montenegro. 

La primera es del riñón de Gerardo Zamora y los otros son aliados locales y ya se hizo habitual que el gobernador reparta sus lealtades en las votaciones.

En la Casa Rosada confiaban en torcer a los tres, pero la sesión sólo puede frustrarse si alejan del recinto a varios peronistas y no parece posible. 

Esta tarde, además de Menem, sólo faltaron a la reunión el sanjuanino Rubén Uñac, el fueguino Julio Catalán Magni, el chaqueño Eduardo Aguilar y el santafesino Omar Perotti. 

El primero puso nervioso a más de uno, porque al presidente le gusta llamar a su hermano y gobernador para presionarlo antes de las votaciones. No siempre lo logra. 

En simultáneo a esa reunión, Macri y Frigerio recibieron a los cinco senadores del interbloque federal y comunicaron que ninguno de ellos avalará la ley.

Fueron hasta la Casa Rosada los salteños Juan Carlos Romero y María Fiore Viñuales, Carlos Reutemann y los neuquinos Lucila Crexell y Guillermo Pereyra, que en un comunicado había anunciado que votaría a favor. Macri dice haberlo convencido.

La ley anti tarifazos fue consensuada por la oposición de Diputados hasta minutos antes de votarse y contempla retrotraer el valor de luz, gas y agua a noviembre (un pedido del kirchnerismo) y enganchar cualquier aumento futuro al coeficiente de variación salarial, con la excepción de los consumos superiores.

Minutos antes de votar y por pedido de los gobernadores se eliminó el artículo que bajaba el IVA de 21% a 10.5% para consumos domiciliarios y de 27% a 21% para las Pymes. Para el Gobierno, significaba un costo fiscal de 80 mil millones anuales.

El senador neuquino Pereira se sumó este martes al encuentro con Macri y no votaría el proyecto de tarifas.

Pero Juan Schiaretti y Juan Manuel Urtubey cambiaron de idea la semana pasada y pidieron votar una ley que sólo contemple la baja del IVA y deje liberado a Juan Aranguren la política tarifaria.

Los senadores de Cambiemos la avalaron pero los peronistas ignoraron a los mandatarios y mañana intentarán sancionar la ley como llegó de la Cámara vecina. Macri, hasta ahora, no puede evitarlo. Y la vetaría el jueves a la mañana.