Cambiemos

Durán Barba había anticipado el malestar social: "La gente siente que camina sola en el desierto"

Lo dijo su socio Zapata al presentar el último focus. Reactivan la estrategia de cercanía.

El sociólogo español Roberto Zapata, socio de Jaime Durán Barba, encendió la alarma en Cambiemos hace unas tres semanas, cuando informó durante una reunión reducida en la Rosada que sus últimos focus group indicaban que existe una sensación de frustración en la gente.

Zapata hizo esos estudios en varias provincias y los presentó a la mesa chica de comunicación del PRO durante la última semana de abril junto al gurú ecuatoriano, Santiago Nieto y el cerebro publicitario del macrismo, Joaquín Mollá, que supervisa la estrategia oficial desde Miami.

Tanto en el gobierno de Mauricio Macri como en el de María Eugenia Vidal buscaron mantener en reserva las conclusiones de los focus, pero tomaron la sugerencia de Zapata y Durán Barba sobre la necesidad de retomar la estrategia de "cercanía", un clásico del PRO que incluye timbreos, bajadas al territorio y fotos con los vecinos.

Como supo LPO, esos focus anticiparon a la cúpula de Cambiemos que hubo un "cambio de percepciones" de la gente respecto al rumbo del Gobierno. Un malestar que creció en las últimas semanas con la crisis por la corrida cambiaria.

Zapata dijo que "la gente siente que camina sola por el desierto" mientras los funcionarios los miran desde un "podio", por eso sugirió bajar más al territorio

"La gente siente que camina sola por el desierto", fue la metáfora que eligió el español para explicar lo que vio en los grupos. La frase no tardó en convertirse en el latiguillo de algunos dirigentes bonaerenses del PRO, que ahora la usan en reuniones para explicarles a sus militantes que deben bajar más al territorio.

Las conclusiones de Zapata generaron preocupación porque reflejan un cambio en el humor social. Durante el primer año de gestión, los focus daban una imagen más alentadora: la gente percibía al Gobierno como un "paisaje con cielo despejado". 

En ese entonces, Durán Barba interpretaba que había un fuerte apoyo a la gestión, pese a que comprendían los sacrificios del largo camino gradualista. Los estudios cualitativos eran acompañados por encuestas, que traducían esta imagen como "expectativas a futuro" y un guiño a que "vamos a salir adelante".

Según contaron a LPO fuentes que estuvieron en esa reunión, Zapata reveló que ahora la gente siente que está "empujando camellos, sofocada por el calor, mientras los dirigentes miran todo desde el podio". Por eso, la sugerencia fue que "salgan a empujar los camellos, en vez de quedarse con el sultán". 

En el Gobierno hacen la salvedad de que el asesor español no está empapado de "la diaria" argentina y dicen que sus análisis no dan una imagen certera del panorama. "Vamos a reforzar la cercanía, hablar con la gente y dejar que se expresen, pero su frustración no es necesariamente con el Gobierno sino con la realidad, porque es la primera vez que la conocen sin que les mientan", opinó un funcionario que participa de las discusiones de comunicación.

En este escenario se definió retomar los timbreos mensuales y que salgan a la calle todos los funcionarios, tanto de Nación como de Provincia. El timbreo del sábado tendrá además un tono motivacional para la propia tropa, mientras algunos dirigentes de Cambiemos no ocultan sus inquietudes por cómo será la reacción popular después del temblor económico de las últimas semanas. 

Incluso se abrió un debate hacia adentro porque algunos querían incorporar volantes que explicaran las últimas medidas del Gobierno, algo inédito en el oficialismo y en la impronta "casual" -alejada de la militancia tradicional- que buscan que rija en los timbreos.  

Por eso, desde la mesa nacional de Cambiemos rechazaron la idea de "volantear", aunque igual confirmaron a LPO que enviaron a todo el país una serie de consignas para unificar el discurso: "Algunas localidades harán volantes. Nosotros sugerimos que no, pero mandamos lo que estamos diciendo en la última semana para que tengan toda la información".

La negativa a que entreguen volantes también tiene que ver con que el timbreo no pierda su "esencia", ya que la clave es "ir a escuchar, no a hablar". "La idea no es tirarle a la gente información por la cabeza que los contradiga. El objetivo es construir un diálogo, no una competencia de quien tiene razón". 

En Cambiemos creen que la caída en las encuestas no se debe sólo a las medidas "poco simpáticas" del Gobierno sino a que no supieron salir a comunicarlas bien. "En estos meses no salimos a la calle como deberíamos haberlo hecho. Estuvimos muy dormidos mientras se tomaron decisiones complejas", dijo un legislador que confía en que retomar la estrategia de cercanía les permitirá revertir la caída de Macri y Vidal.