SOLÁ MANDO A CALLAR A SUS MINISTROS

Les exigió que solo se refieran a los avances en la justicia.

El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Felipe Solá, le envió un mensaje contundente a sus ministros y legisladores más cercanos: dejar de hacer declaraciones sobre el secuestro de Luís Gerez.

Según confió una inobjetable fuente a este medio, el mandatario provincial quiere que "actué la justicia" y ante la andanada de rumores sobre este caso, le exigió a sus funcionarios que mantengan una "prudente discreción" para no generar más espinas en un tema de por sí confuso.

La decisión de Solá fue comunicada al finalizar la semana que pasó. Esto lo dialogó al regreso de sus vacaciones con el ministro de Educación, Mario Oporto, quien comienza a tener una relación cada vez más cercana con el gobernador, y también se lo transmitió al titular del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara de Diputados, Fernando Navarro.

"Quiero prudencia y que solamente hagan comentarios respecto a los avances de la justicia. No quiero conjeturas, ni que critiquen a un sector u otro. El tema se resolvió para bien, ahora tenemos que dejar que la cosa avance sin sobresaltos y sin meternos en internismos", dijo seco y áspero Solá a los suyos.

Todavía persisten dudas respecto a los autores materiales e intelectuales del secuestro, el lugar donde estuvo alojado Gerez y como se logró su rápida aparición.

Semanas atrás - esto tomó estado público- Solá le reclamo al vicejefe de Gabinete provincial, Emilio Pérsico, que baje el tono en este tema. Gerez fue militante del Movimiento Evita y mantiene una sólida relación con el piquetero quien mantuvo un perfil muy elevado desde la aparición de Gerez.

Luego, el reclamo que se lanzó a Pérsico - un incondicional aliado del gobernador- es que Solá decidió hacer extenso el pedido a todos sus funcionarios cercanos.