Senado

El Senado sancionó la ley de compre nacional, pero demoró la antimonopolios

Le hizo algunos cambios para que revise Diputados. Las ventajas a las pymes nacionales.

El Senado sancionó por unanimidad la ley de compre nacional, pero modifico la de defensa de la competencia que deberá volver a tratarse en Diputados.

Fueron unos leves retoques, pero suficientes para demorar una ley que Elisa Carrió y Mario Negri promueven desde 2016 y consiste en combatir la creación de monopolios, mediante una Autoridad Nacional de la Competencia y un Tribunal, destinado a seguir conductas como la creación de fusiones.

La ley de defensa de la competencia fue modificada para que el Senado deba avalar a los directores del Tribunal. Diputados tratará los cambios. La de compre nacional fue ley por unanimidad.

Aplicará multas de acuerdo a la gravedad del delito, que pueden alcanzar 4000 millones de pesos. Y habrá un "régimen de clemencia", una especie de delación premiada para arrepentidos de sacar ventaja por no competir.

"Si no hay un porcentaje de concentración establecido esto no sirve, porque quedará a disposición de cualquier juez", advirtió Cristina Kirchner, cuyo bloque fue el único que no acompañó: algunos votaron en contra y otros (como la ex presidenta) se ausentaron.

Los cambios pedidos por el bloque de Miguel Pichetto fueron de forma en algunos artículos pero en otros no: exigieron que sólo el Senado pueda avalar a los miembros del Tribunal de Defensa de la Competencia.

"Le solicito a los Diputados que no hagan más esto de poner que si pasa tanto tiempo sin que el Senado se pronuncie quedan los directores nombrados, porque no se lo vamos a aprobar", gritó Pichetto.

También llegó así la ley de mercado de capitales, en ese caso para la designación de los miembros de la comisión de valores (CNV). Volvió con ese retoque a Diputados.

"la Ley de Defensa de la Competencia sirve para equilibrar el juego y la interacción entre los grandes capitales concentrados y las pequeñas y grandes empresas, y establecer reglas de juego claras", sostuvo la radical riojana Inés Brizuela y Doria, miembro informante de la ley. "No es una necesidad del Gobierno, ni una imposición de un club de países: es una necesidad de la sociedad argentina. El país estaba estancado en la lucha contra los monopolios y la cartelización", agregó.

La imposición se debe al supuesto interés de la OCDE por una ley de este calibre para aceptar a Argentina. El debate, pensado por Cambiemos para mostrarse preocupado por la inflación, tuvo encendidos discursos sobre los precios y tarifas. 

La ley de compre nacional no encontró mayores objeciones, producto del acuerdo celebrado en Diputados el año pasado, tras discutir varios meses sobre el texto original enviado por Francisco Cabrera.

Así se elevaron los márgenes de preferencia, o sea, el porcentaje de precio por encima del resto de las ofertas que las empresas argentinas pueden ofertar en licitaciones y ganar igual.

Pasará del 7% actual al 15% para las pymes y del 5% al 8% para las grandes empresas. Por otra parte, en caso de que una empresa extranjera gane una licitación, deberá subcontratar empresas nacionales hasta cubrir un veinte por ciento del valor de la obra. Se mantiene en el 40%, la participación del componente importado para que la denominación sea "bien nacional".

Y en aquellas compras menores a los 20 millones de pesos, cuando se igualen ofertas con las grandes empresas, las pymes también serán beneficiarias, y gozarán de una reserva de mercado exclusiva.

"En Argentina, cuando hablamos de las compras públicas, hablamos de un 5% del PBI y de un 2,5% del trabajo argentino", señalo la radical Silvia Elías de Pérez, informante de un proyecto que no tuvo objeciones.