El Senado acorrala a Macri con una ley para prohibir los megadecretos
El Senado comenzará a tratar un proyecto de ley para restringir los decretos de necesidad y urgencia, que Mauricio Macri usa con frecuencia y le permiten tomar medidas claves sin consultar al Congreso.
Fue presentado por el senador Maurice Closs, ex gobernador de Misiones, y si prospera los DNUs ya no podrán abordar múltiples temáticas, como el firmado el último 10 de enero por el presidente.
Los decretos presidenciales fueron incorporados a la Constitución de 1994, pero sólo "por razones de necesidad y urgencia" y "en circunstancias excepcionales".
A Macri se le hizo costumbre firmar varios cada verano con el argumento de tener cerrado el Congreso, pese a que puede abrirlo con un simple llamado a sesiones extraordinarias.
En enero sorprendió con el voluminoso DNU para "desburocratizar el Estado", que cambia 140 leyes y borra otras 20. Y trata cuestiones bien disímiles como la incorporación de bitrenes (camiones de doble acoplado), protocolos del Senasa; mayor laxitud para exportar obras de arte, la habilitación para embargar cuentas sueldo y vender acciones de Anses.
Closs quiere que la historia no se repita y en su proyecto pide que los DNUs "se encuentren circunscritos a una única materia, temática y/o situación específica" y no "versen acerca de una multiplicidad de temáticas".
La Constitución sólo prohíbe decretos sobre temas penales, tributarios, electorales o de régimen de partidos políticos; y el misionero pretende agregar restricciones con retoques a la ley 26.122, que regula su implementación.
Propone limitarlos a "disposiciones que fueren imprescindibles para resolver la situación de emergencia que justificó su dictado y en todos los casos su vigencia será por tiempo determinado".
Y consultar a comisiones temáticas para su debate en la bicameral de trámite legislativo, que es la encargada de dictaminar si era necesario y urgente para el presidente tomar decisiones sin redactar proyectos de ley. Con el megadecreto lo hizo en tiempo récord y sin preguntar a legisladores especialistas en cada área.
Closs tiene un bloque propio junto a su coterránea Magdalena Solari, pero ambos suelen acompañar las medidas del Gobierno en sintonía con el bloque Justicialista, de Miguel Pichetto. Por lo tanto, no sería descabellado que se unan también para frenar los decretazos de Macri.
El Senado aún tiene pendiente el tratamiento del DNU de desburocratización, que Diputados cajoneó porque en su reemplazo Cambiemos acordó con el bloque de los gobernadores tratar y aprobar tres leyes sustitutas.
Replicaron su contenido pero por presión de la oposición suprimieron temas polémicos como el embargo a las cuentas sueldo o el permiso para operar con acciones de Anses en el mercado financiero.
Aunque estos proyectos también derogan el DNU, mientras no sean sancionados seguirá vigente, porque sólo quedan anulados si ambas Cámaras así lo disponen. O sea, el Senado tiene la última palabra.
Y puede dar el primer paso para que esta novela de enredos sobre decretos estivales no se repita.