Detienen a ex funcionarios de Peppo y Cambiemos exige su renuncia
El escándalo por presunta corrupción en el Gobierno de Chaco sigue escalando. Este viernes la justicia provincial detuvo a dos ex funcionarios y dos ex empleados acusados de lavado de dinero, malversación de fondos y enriquecimiento ilícito.
En el medio del enorme revuelo que provoca el caso, la oposición aprovecha para presionar al gobernador Domingo Peppo. La referente de Cambiemos en la provincia, la diputada Aída Ayala, exigió la renuncia del mandatario peronista.
Los detenidos por orden de la justicia provincial (que investiga una parte de la causa, enriquecimiento ilícito y malversación de fondos, mientras que la federal entiende en el delito de lavado) son Horacio Rey, ex secretario General de Gobierno; su esposa Susana Fernández, exsecretaria privada de la gobernación; Roberto Lugo, ex subsecretario de Comercio; eIsmael Fernández, ex coordinador de la Unidad Ejecutora Chaco Construye. Los hermanos Fernández eran empleados de la gobernación.
La semana pasada, el fiscal federal Patricio Sabadini ordenó una serie de allanamientos en dependencias del gobierno chaqueño, lo que derivó en la decisión de Peppo de separar de sus cargos de los involucrados.
El sacudón político que generó el caso obligó a Peppo a declarar días atrás que no tiene pensado renunciar a su cargo, a partir de algunos rumores que corrían en la provincia.
Esos rumores se convirtieron directamente en un pedido de la principal referente de la oposición, la ex funcionaria nacional Ayala. La dirigente de Cambiemos le pidió a Peppo que "dé un paso al costado ya que ha perdido legitimidad" en pos de "la pacificación política y por cuestiones éticas"
El pedido desató una serie de críticas contra la ex intendenta de Resistencia, a quien le recordaron que con la misma vara que ella mide a Peppo, la oposición nacional podría pedir la renuncia de Mauricio Macri por los funcionarios involucrados en denuncias de corrupción. La detención de los ex funcionarios seguramente alimentará el entusiasmo de los dirigentes chaqueños de Cambiemos para acorralar a Peppo.
Tras su viaje a Estados Unidos, el gobernador buscará conseguir algo de oxígeno con una renovación del Gabinete, que incluiría cambios de nombres importantes y unareducción del número de ministerios. También se anunciaría una reducción del gasto público y mayores controles en las cuentas públicas.
El ruido político en Chaco también roza al fiscal Sabadini. Durante la semana trascendió un viaje relámpago a Buenos Aires, mientras que él admitió que después de los allanamientos del viernes pasado se puso en contacto con Gonzalo Cané, el operador judicial de la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich. El funcionario, que siguió de cerca casos de extrema sensibilidad para la Rosada como la desaparición de Santiago Maldonado, "brindó colaboración a través de la Unidad de Delitos Económicos de la Prefectura Naval", según contó Sabadini a medios chaqueños.