El peronismo se niega sesionar en la Ciudad en rechazo a las detenciones de Bonadio
La legislatura porteña sesionará a pesar de la ausencia de los diputados del peronismo y del kirchnerismo. El oficialismo no podrá aprobar algunas de las leyes que requieren 40 votos, pero de todas formas prefirió avanzar. Según anunciaron habrá una sesión el 22 de diciembre próximo.
Horacio Rodríguez Larreta no podrá contar con la ley que crea Distrito Joven, ubicado en el predio del Tiro Federal, que tenía el apoyo de algunos legisladores justicialistas. El macrismo sí consiguió el número para concesionar el sistema de bicicletas y eximir de impuestos a los beneficiarios del PROCREAR en la parte sur de la Ciudad.
La designación de Gabriel Fuks como Defensor Adjunto de la Ciudad deberá esperar hasta la anteúltima semana del año, al igual que las concesiones de los bajo autopista.
Desde la mañana la legislatura fue un hervidero. Una manifestación de estudiantes y trabajadores de los institutos docentes rodeó el parlamento porteño para protestar por la disolución de los institutos y su reemplazo por una universidad.
Dentro de la Legislatura, con la detención de dirigentes kirchneristas y el pedido de desafuero de Cristina Kirchner, el oficialismo tenía dificultades para conseguir el número necesario para las leyes de 40 votos. Es que el peronismo y el kirchnerismo se negaban a bajar y algunos de sus diputados habían comprometido su apoyo a esas leyes.
El PRO pidió un cuarto intermedio para destrabar la situación, pero desde el oficialismo admitieron que la sesión podría llegar a reprogramarse para mañana. Hasta Juan Manuel Olmos participó de la reunión organizada por el kirchnerismo, el bloque peronista y Gabriel Fuks.
"Se cayó la sesión", anunciaba apesadumbrado un legislador oficialista. A los pocos minutos el panorama cambió. El oficialismo decidió avanzar a pesar de las ausencias. Desde la izquierda anunciaron que solamente participarían de la jura de Patricio del Corro, quien reemplazó a Marcelo Ramal por el sistema de bancar rotativas que tiene el FIT. "Vinimos porque si no pasaba para marzo. Pero no hay un contexto para sesionar", dijeron.
La posición del kirchnerismo y el PJ
"Se ha llegado al punto máximo de degradación institucional desde la vuelta de la democracia", aseguraron desde Unidad porteña, el interbloque compuesto por el PJ y el kirchnerismo. "Se ha quebrado el Estado de Derecho en la Argentina", leyó Carlos Tomada, el titular del bloque del FPV rodeado por los legisladores del espacio a los que se sumó Gustavo Vera.
En un principio desde el peronismo intentaron negociar hacer manifestaciones al principio de la sesión y luego retirarse del recinto, pero el oficialismo no aceptó la propuesta. El PJ de mostró inflexible en su postura de no sesionar y por eso algunos diputados oficialistas dieron por caída la sesión. María Rosa Muíños, Carlos Tomada y Gabriel Fuks fueron los encargados de sentarse con el oficialismo y anunciarles su decisión de no ser parte de la última cita prevista del año.
"Quienes hoy gobiernan han hecho de las instituciones un arma contra sus opositores. Las han desnaturalizado a tal punto, que han sido puestas directamente contra el pueblo y la democracia. Quieren atemorizar a todo aquel que ose pensar distinto o desafiar al poder", agregó Tomada.
"Los argentinos vivimos hoy en libertad condicional. No hay garantías procesales ni presunción de inocencia. La Constitución Nacional ha sido pisoteada de una forma inédita", señaló el ex ministro de Trabajo.