Peronismo

Uñac enfría los tanteos de la liga de gobernadores para que reemplace a Urtubey como candidato

"Llevo recién un año y medio de gobernador sería desatinado una aventura nacional", afirmó el senjuanino.

La liga de gobernadores peronistas entró en fase crítica después de los magros resultados que sacaron varios de sus principales referentes, especialmente Juan Manuel Urtubey y Juan Schiaretti, y en las últimas horas empezó a sonar con fuerza el nombre del sanjuanino Sergio Uñac como nuevo líder del grupo y potencial candidato presidencial de relevo del salteño.

El gobernador de San Juan logró una contundente victoria por 22 puntos de ventaja sobre la lista de Cambiemos, una diferencia sólo superada dentro del peronismo por el inoxidable Gildo Insfrán. En medio de la malaria de los presidenciables peronistas, el triunfo de Uñac lo ubicó automáticamente en esa grilla, en la que le suma su perfil joven, moderado y de centro, como imagina Miguel Pichetto al nuevo peronismo.

"Este es el triunfo más contundente que podamos recordar y también en el orden nacional, somos de las provincias peronistas que mayor ventaja ha logrado con nuestros circunstanciales adversarios", sacó pecho Uñac, que enseguida aclaró que el "posicionamiento" que logró a nivel nacional lo usará sólo con el objetivo de defender a su provincia y enfrió la posibilidad de buscar la Presdiencia.

"Llevo recién un año y medio de gobernador de la provincia y sería desatinado de mi parte plantearle a los sanjuaninos que yo ahora tengo algún tipo de aventura nacional: yo tengo que seguir estando acá, aunque desde San Juan puedo aportar a la transición y renovación del peronismo", aclaró.

Uñac tiene el mérito de haber logrado la unidad con el kirchnerismo duro, algo que otros mandatarios no consiguieron y les terminó costando el triunfo como a Urtubey y Domingo Peppo.

Pero más allá del posicionamiento nacional, el objetivo más inmediato de Uñac es consolidar su poder interno, en medio de una sorda disputa con José Luis Gioja. A futuro, el gobernador ya aclaró que piensa buscar la reelección en 2019, y recién en 2023 analizaría una incursión nacional.

De todos modos, los resultados del domingo lo ubican como un posible líder de la liga de gobernadores. "Él estaba en sintonía con Urtubey y algunos anoche en el PJ ya insistían con la idea de que él sea quien encabece la renovación del peronismo", dijeron a LPO fuentes al tanto de la interna sanjuanina.

La buena sintonía con el salteño fue destacada por el propio Uñac, quien afirmó que "con Urtubey tenemos buena relación, recorrió el país e hizo las cosas bien". Pero enseguida aclaró que "los resultados no lo acompañaron" y agregó que la doctrina de los peronistas "debe estar acompañada de resultados electorales". Una sutileza para el salteño que ni siquiera alcanzó el cuarto de los votos en su provincia.

Más allá de las intenciones de Uñac de cara a 2019, lo cierto es que el PJ se ha quedado con pocas cartas en la mano para su plan presidencial. Urtubey no sólo perdió él, sino también quienes lo empujaban en la interna, Schiaretti, Peppo y Rosana Bertone. La esperanza de Pichetto de levantar a Sergio Massa no resultó, y mucho menos la de Florencio Randazzo.

Los otros ganadores dentro la liga fueron Juan Manzur y Lucía Corpacci, ninguno con perfil presidenciable. El tucumano, además, ya está pensando en la reelección: este lunes Tucumán amaneció empapelada por afiches que lanzan la fórmula Manzur-Jaldo para 2019. Acaso un mensaje para Alperovich.

Los otros ganadores fueron los veteranos del peronismo que se mantuvieron afuera de la liga de moderados, por el contrario fueron los más enfrentados a Macri: Carlos Verna, Gildo Insfrán y Alberto Rodríguez Saá. Sólo de los hermanos puntanos se podría esperar algún intento de ir por la presidencia nuevamente.

Otro ganador del peronismo pero en una escala menor fue el rionegrino Martín Soria, que en 2015 relegó la posibilidad de ir por la gobernación para que lo haga Pichetto, pero esta vez no perdió tiempo y anoche mismo lanzó su candidatura.