Peronismo

El kirchnerismo fue el verdugo de los gobernadores peronistas

Las listas K complicaron a Urtubey, Peppo, Schiaretti. Los que no rompieron lo capitalizaron.

Los gobernadores peronistas que ignoraron a los candidatos kirchneristas y les permitieron armar sus listas lo pagaron con una derrota que los alejó de cualquier pelea por una sucesión presidencial.

Es Salta a Juan Manuel Urtubey le costó carísima la candidatura de Sergio Leavy por el Frente Ciudadano por la Victoria, que terminó tercero, consiguió su banca y le permitió un triunfo a Cambiemos sobre el peronismo oficial.

Destino similar sufriría el Domingo Peppo, de Chaco. Los 11 puntos que obtendría por Unidad Ciudadana Fabricio Bolatti, ex secretario de Gobierno de Resistencia, le permiten ganar a Cambiemos.

Chaco es un ejemplo de los que significó para los gobernadores romper el peronismo: aunque dividen en partes iguales los 4 diputados en juego, la derrota le bajó el precio a Peppo en una mesa peronista que defina el futuro del espacio político.

En ese ámbito ya no tendrá voz y voto Juan Schiaretti tras la dura derrota en manos de Cambiemos, por 48 a 30. La lista kirchnerista, liderada por Sergio Leavy, quedó tercera con 10 puntos y podría robarse un diputado.

En Tierra del Fuego ganaba Cambiemos, pero la segunda banca la robaba el kirchnerista Martín Pérez, por encima de la lista apadrinada por Roxana Bertone. La unidad peronista rindió sus frutos en San Juan, donde el Rubén Uñac, hermano del gobernador, se impuso sin problemas.

Lucía Corpacci amparó una lista K que ganó las internas y las generales y el pampeano Carlos Verna hizo las paces con Cristina y pela voto a voto con Cambiemos.

Sin internas peronistas, el formoseño Gildo Insfrán y el tucumano Juan Manzur ganaron sin problemas. No así el entrerriano el entrerriano Gustavo Bordet.