El hermano de Agustín Rossi expande su imperio económico al Conurbano y choca con Carrió
El cuestionado empresario del transporte urbano, Alejandro "Fratacho" Rossi, continúa la expansión de sus negocios en localidades del Conurbano bonaerense gobernadas por intendentes kirchneristas, pero también algunos de Cambiemos.
A través de la firma Autobuses Buenos Aires, creada tras la cuestionada quiebra de Autobuses Santa Fe, Rossi logró quedarse con las concesiones de transporte urbano de Almirante Brown, Vicente López y Lomas de Zamora, donde además quiere invertir en un centro logístico para Río Paraná Cargas, otra compañía de su propiedad.
A partir de la sociedad que conformó con el Grupo DOTA de Ángel Faija, otro jugador de peso en los negocios del transporte público, le permitió expandirse en los municipios que gobiernan los peronistas Martín Insaurralde y de Mariano Cascallares.
Y a través de la adquisición de la compañía Tomás Guido y Transportes San Vicente le permitió hacer pié en San Vicente gobernada por el intendente de Cambiemos, Mauricio Gómez.
Este empresario -hermano del kirchnerista Agustín Rossi que encabeza la lista del PJ en Santa Fe- armó su imperio a partir de la compra de empresas pequeñas que atravesaban profundas crisis derivadas, sobre todo, de peleas gremiales. Ese fue el proceder en la ciudad de Santa Fe y que está replicando en las localidades del sur bonaerense.
Además, en Lanús está negociando la adquisición de Expreso Lomas y haciendo trámites para asociarse con Compañía Andrade SRL para desembarcar en el territorio del macrista Néstor Grindetti.
Tal como informó este medio, Fratacho Rossi se convirtió en uno de los empresarios más importantes del transporte público del país en poco más de una década y por medio de varias firmas logró explotar servicios en distintas localidades de Santa Fe, Córdoba, Ushuaia, Neuquén y Chaco, entre otras.
Los oscuros engranajes del sistema de subsidios al gasoil que dispuso Julio de Vido a través de Ricardo Jaime le permitió amasar una fortuna en poco tiempo y operar de manera monopólica en los lugares que logró hacerse del servicio público.
De hecho, la UTE que conformó Recreo SRL, San Francisco y Autobuses Buenos Aires fue la única propuesta que quedó subestimada en la adjudicación del nuevo sistema de transporte de la ciudad de Rosario el mes pasado. Fratacho tiene participación principal en las tres empresas y el socialismo prefirió no renegar con sus antecedentes.
Los vínculos con Corral y la bronca de Lilita
Alejandro Rossi maneja el transporte público de la ciudad de Santa Fe a través de la firma Recreo SRL. Como se indicó anteriormente, Fratacho fue comprando empresas más chicas que atravesaban profundas crisis derivadas de conflictos gremiales para llegar a monopolizar el servicio.
El intendente de Santa Fe, José Corral.
El mismo proceder utilizó para agrandar su empresa de trasporte de cargas, Río Paraná Cargas, con la que absorbió la distribución de los lácteos Milkaut o la gaseosa Naranpol. Ambas atravesaron conflictos gremiales durante tiempos prolongados.
Claro que el emporio montado en la capital provincial no hubiese prosperado sin la venia del poder político local y los estrechos nexos que llegó a tejer con el actual intendente el radical José Corral.
Tal es así que aparte de manejar los colectivos, la empresa Recreo tiene hace ocho años la concesión del Tren Urbano, un ferrocarril metropolitano que nunca funcionó y las veces que lo sacaron a la calle para probarlo protagonizó accidentes de tránsito.
A pesar de estar fuera de servicios, luego de haberse invertido más de 20 millones de dólares, la empresa sigue recibiendo subsidios mensuales.
En los últimos meses, Fratacho Rossi y José Corral protagonizaron otro escándalo de magnitudes cuando el periodista local, Pablo Benito, reveló las negociaciones entre el intendente y el empresario para la adjudicación de la concesión de la Terminal de Ómnibus.
Como resultado de un sospechado llamado a licitación de la estación se terminó presentando una sola UTE integrada por Recreo, Autobuses Buenos Aires y el Grupo ERSA de los correntinos Romero Feris con quien Fratacho tiene varios negocios.
Sin mediar publicaciones en medios masivos, como obliga cualquier llamado a licitación, y esquivando el Concejo Municipal, Corral ató la concesión de la Terminal al grupo Rossi, "un negocio que entre alquileres de locales, estacionamientos y servicios adicionales representan ingresos por más de 10 millones de pesos por mes sin contar el servicio de embarque y uso de plazas" explicó Benito en diálogo con LPO.
Desde el Concejo, la oposición rechazó la licitación con un solo oferente argumentando que los titulares de empresas de colectivos no podían tener injerencia en la administración de las terminales. De hecho, la licitación de Retiro se cayó en dos oportunidades porque la empresa Flecha Bus intentó hacerse con la concesión.
A pesar de las irregularidades, el intendente y presidente nacional de la UCR vetó el rechazo y ahora los ediles de la oposición deberán conseguir una mayoría especial para tumbar el veto.
Sin embargo, detrás de la concesión de la Terminal, se sospecha que existe un jugoso negocio inmobiliario sobre las 10 hectáreas que rodean el edificio y que según Benito sería el objetivo principal de la maniobra.
Lilita Carrió está al tanto de los nexos entre los hermanos Rossi y Corral. De hecho, cada vez que visitó la provincia, el radical que acompaña a cuanto funcionario nacional pisa Santa Fe, queda excluido de los encuentros.