"De repente apareció un cuerpo flotando": los mapuches en el corazón del misterio Maldonado

De repente había un cuerpo flotando.

Así habla Soraya Maicoño, que puede caminar por las calles de Esquel, pero prefiere quedarse a cuidar a su hija en el Pu Lof, el campamento mapuche en el que desapareció Santiago Maldonado el primero de agosto y donde fue hallado un cadáver este martes.

Ella es la vocera de los mapuches, que tras siglos de disputas con el hombre blanco, y décadas de conflicto por las tierras con la compañía Benetton, ahora tienen nuevos enemigos: Gendarmería y los periodistas de Buenos Aires.

Estábamos más tranquilos, ya nos habíamos olvidado, dice un lugareño que nació en Buenos Aires pero vive en Esquel desde los tres años y destaca que los vecinos no se olvidan de pagar las rifas para que Belgrano pueda pagar los pasajes de sus jugadores en el Torneo Federal C.

Los esquelenses no terminaron de saborear la temporada de esquí más larga de los últimos 30 años, ni el mundialito que fueron a jugar a Colombia los chicos del Club Independiente Deportivo, el más viejo del pueblo de 35 mil habitantes, que se sintieron famosos cuando el piloto del único vuelo diario que llega a Esquel los felicitó a diez mil metros de altura.

Esta semana, y por primera vez en su historia, vieron cómo la Policía custodiaba el cementerio, en donde está la morgue a la que fue llevado el cadáver y cómo volaban piedras contra el Juzgado Federal número 1, en donde radica la causa por la desaparición de Maldonado. "Nunca se vio algo así por acá", cuentan en el pueblo, todavía lleno de papeles que dicen Se Busca al lado de la foto más difundida del año.

Sergio Maldonado, su señora y la abogada se hicieron presentes en el campamento el martes a las 7.15 junto con buzos, con Prefectura, con perros y bomberos. Se dividieron en tres grupos: uno río arriba, uno al centro y otro río abajo.

"Todo sucedió con normalidad, tranquilidad e incluso conversando con personal de Prefectura que nos decía que era un despropósito volver allí, que allí ya habían buscado minuciosamente. La última vez que entró Guido Otranto lo hizo con más de 300 efectivos. De repente apareció un cuerpo flotando, en un lugar que había sido rastrillado en todas las oportunidades", asegura Soraya. Repite que a 200 metros de donde estaba el cadáver los mapuches juntan agua.

¡Son unos desgraciados!, exclamó Sergio Maldonado desde la barranca en la que divisó el cuerpo el martes. Se refería a la teoría que corre con mayor fuerza antes de la autopsia: a que el cuerpo fue plantado.

"Si hubiera estado desde antes, hubiera aparecido río abajo, o hubiera emergido, los animales carroñeros y las aves carroñeras hubieran dado aviso de esa situación. Cuántas veces en el campo se cae una vaca y las aves están dando vuelta alrededor", grafica Maicoño.

Mientras en el Gobierno dejan circular versiones de un pase de facturas entre Gendarmería y la Federal, e incluso un montaje de los propios mapuches, los habitantes de la Pu Lof siguen denunciando que a Maldonado se lo llevaron los gendarmes, pero no entienden quién pudo ser capaz de plantar un cuerpo 80 días después.

-No está en nuestro rakizuam mapuche llegar a una situación tan extrema -se lamenta la vocera de la Pu Lof. El rakizuam es el conocimiento ancestral.

A la hora de las hipótesis, los mapuches no quieren hacer denuncias públicas, pero apuntan tanto a los puesteros de Benetton como a mapuches que trabajan para la compañía. Por yanacona se conoce a los mapuches traidores.

Andrea Millañanco, pareja del lonko Facundo Jones Huala, asegura que los accesos a Pu Lof para plantar el cuerpo no fueron por el ingreso por ruta 40 que sale en la televisión.

"Hay accesos del otro lado del río, que rastrillaron más de 300 efectivos, territorio del cual tienen mucho conocimiento los puesteros de la compañía de Benetton. Ellos saben cuáles son los pasos, las entradas del otro lado del río. Así que no cualquiera puede acceder del otro lado del territorio. Es gente con conocimiento, como así también sucedió con la quema de las casas del otro lado de la Vuelta del Río. No es cualquier persona, es alguien que sabía específicamente cómo llegar desde diferentes lugares", relata Millañanco.

El pedido de liberación de su pareja, Jones Huala, fue el motivo de la represión de Gendarmería del primero de agosto. "Nosotros vamos a seguir sosteniendo que a Santiago se lo llevó Gendarmería", repite antes de volverse al campamento adonde estará encerrada durante el fin de semana, cansada de los medios.