Provincia

Ofensiva de Farmacity para que la Corte le permita desembarcar en Provincia

La firma de Quintana publicó una solicitada reclamando que la Corte le habilite el ingreso.

Farmacity salió a pedir públicamente en una solicitada que se publicará este sábado en los principales diarios y a la que accedió en exclusiva LPO, que María Eugenia Vidal la habilite a desembarcar en la provincia de Buenos Aires, donde están vedados por una ley que prohíbe las sociedades anónimas en el rubro.

La compañía creada por el vicejefe de Gabinete, Mario Quintana, planteó sin éxito en la justicia la inconstitucionalidad de esa norma y luego que su planteo fuera rechazada en todos los niveles de la justicia bonaerense, llegó con el reclamo hasta la Corte Suprema de Nación, que pidió el expediente para analizar al caso.

El tema es considerado "tóxico" en términos políticos tanto en la Corte Suprema, como Casa Rosada y en el gobierno de Vidal, porque cualquier decisión favorable a la cadena luego de años de consistente jurisprudencia en contra, podría ser vista como el uso de influencia política para favorecer los intereses de la compañía de la que el actual vicejefe de Gabinete sigue siendo accionista. Pero la presión es fuerte, como quedó claro con la solicitada.

Para Quintana el ingreso de Farmacity en la provincia es estratégico porque aumentaría varias veces el valor de la compañía de la que sigue siendo accionista, al igual que su fondo Pegasus.

La celeridad del máximo tribunal alertó a los laboratorios, que lideran el lobby  junto al Colegio de farmacéuticos de la Provincia para frenar a Farmacity en ese territorio. Los laboratorios liderados por Roemmers temen el poder de negociación que alcanzaría Farmacity si ingresara en la provincia, capas de obligarlos a rebajas en los medicamentos, mercado que hoy manejan en un virtual oligopolio.

Para los accionistas de Farmacity, la movida tiene además un motivo estratégico. Aunque ya tienen presencia en 14 provincias, Buenos Aires es clave para subir por las nubes la cotización de la empresa, para una eventual venta posterior. No es un secreto que el modelo de negocios de Quintana y su fondo Pegasus es precisamente ese: Crear o comprar compañías, valorizarlas y luego vender parte de su paquete accionario.

La decisión de Farmacity de levantar el perfil en una pelea que durante los dos primeros años del mandato de Macri eludieron dar, coincide con una notable pérdida de pruritos de los empresarios más cercanos a Macri para manifestar su voluntad de expansión, luego del triunfo de Cambiemos en las primarias. 

En esa línea Nicolás "Nicky" Caputo se acaba de llevar la parte del león de la última licitación de centrales de energía y también resulta sugestivo el control que tomó Quintana de la operación del Correo Argentino y su supuesto interés por OCA. La logística es un rubro crítico para Farmacity. Todas señales que sugieren acaso la tentación macrista con inaugurar una nueva hegemonía en la Argentina.

La solicitada publicada por Farmacity para reclamar su ingreso a la provincia de Buenos Aires.

Desde que Macri es presidente, Quintana logró avanzar varios casilleros en una pelea que venía perdiendo en toda la regla. Primero desplazó a Carlos Regazzoni del Pami. Este funcionario estaba -según la visión del vicejefe de Gabinete- alineado con los laboratorios, que en su momento militaron en número de locales de Farnacity que podían venderle a la obra social de los jubilados, por lejos el principal comprador de remedios.

En lugar de Regazzoni, el vicejefe de Gabinete logró ubicar a Sergio Cassinotti, quien inició una guerra contra los laboratorios y aflojó en los hechos las barreras contra Farmacity.

Los laboratorios también ponen la mira en Carlos Rosenkrantz, flamante juez de la Corte Suprema, designado por Macri. Fue abogado de Farmacity y si bien debería excusarse cuando el máximo tribunal trate el caso, su influencia entre sus pares es haría sentir.

Como explicó LPO, Vidal y su ministro de Salud Andrés Scarsi ignoraron el conflicto y ahora deberán soportar la presión pública, que empezó con un comunicado.

"Nos gustaría llevar a cabo nuestra tarea en la provincia de Buenos Aires, pero una ley sancionada hace 30 años nos lo impide. Estamos convencidos de que la comunidad se beneficia en su atención farmacéutica con más y no con menos opciones", señaló Farmacityen el texto, que no anduvo con vueltas.

Fuentes de la compañía negaron cualquier intención de incomodar la gobernadora. "Le hablamos a la gente", explicaron. 

Pero a Vidal no le será fácil convencer a legisladores de cambiar la ley, porque los laboratorios se hacen pensar entre los representantes bonaerenses de todas las fuerzas. Un fallo de la Corte no le daría otra opción.