Elecciones

Convertir a Massa en el hombre invisible, la nueva estrategia del gobierno

Complicado en las encuestas, en Cambiemos hacen un gran esfuerzo para sacarlo de la escena política.

Como última jugada para el tramo final de la campaña, el Gobierno está decidido a hacer todo lo necesario para convertir a Sergio Massa en el hombre invisible. Según pudo saber LPO, existe una orden directa por parte de los guionistas de la estrategia electoral de no mencionar al líder del Frente Renovador y operar sobre los medios permeables para que se plieguen a esa decisión.

Ni María Eugenia Vidal -el rostro principal de la campaña-, ni los cinco primeros candidatos -Esteban Bullrich, Gladys González, Graciela Ocaña, Toty Flores y Guillermo Montenegro- deben mencionarlo durante sus apariciones públicas. Solo es posible hablar de Massa en casos muy puntuales, en situaciones en donde la capacidad de daño hacia el diputado justifique la mención.

El problema para Cambiemos es que no está garantizado el segundo lugar para Bullrich. Ese fue uno de los motivos por los cuales, como adelantó LPO, los diarios de mayor tirada no publicaron encuestas este domingo. "Lo que pasa es que no hay clima electoral", se justifican en el PRO. Luego, a regañadientes, dejan entrever los problemas para trasferir los votos de Vidal hacia los candidatos y admiten que los sondeos no son lo que esperaban a esta altura.

La encuesta de julio de Managment & Fit no publicada, cantó que Esteban Bullrich está con 23 puntos, apenas un punto por necima de Massa en la caterogía de senador nacional y siete puntos por debajo de Cristina.

La posibilidad de que Bullrich quede en tercer lugar hace implosionar el escenario que en las últimas horas propalaban desde las usinas de campaña de Cambiemos. Según explicaban, un Bullrich en segundo lugar detrás de Cristina Kirchner terminaría impulsando a Cambiemos al primer lugar en octubre, ante un eventual rechazo del electorado a ver a la ex presidenta nuevamente en una posición de proyección para recuperar el poder en el 2019.

Pero claro, ese esquema podría funcionar con Bullrich en segundo lugar y a no más de tres puntos detrás de Cristina. Pero no resiste un escenario en el que el segundo sea Massa y Cambiemos quede relegado al tercero.

El infierno tan temido ahora en el oficialismo es que la salida del electorado para resistir la posibilidad de que la ex presidenta gane en octubre sea el líder del Frente Renovador.

Por eso, la nueva estrategia de Cambiemos es invisibilizar a Massa e intentar levantar a un alicaído Florencio Randazzo. Fuentes del gobierno aseguraron a LPO que la idea inicial era que el ex ministro le sacara votos a Cristina. Esa premisa quedó en la historia. 'El Flaco' se estancó en 5/6 puntos y no crece. El problema para Cambiemos es que el voto 'peronista no cristinista' puede terminar yendo hacia Massa como voto útil.

Esteban Bullrich en una reciente visita a La Plata.

En el gobierno operaron fuerte este fin de semana para que los diarios de mayor tirada no publicaran los estudios de opinión pública que habitualmente se difunden dos semanas antes de cada elección. Había un motivo clave para eso: los sondeos ubicaban a Bullrich en una peligrosa pelea cuerpo a cuerpo con Massa que lo ubicaba al filo del tercer lugar.

La encuesta no publicada de Management & Fit la da a Cristina el primer puesto a 7,8 puntos de sus competidores. El sondeo muestra a la ex presidenta con 30,9 puntos, casi 8 por encima de los 23,1 puntos de Esteban Bullrich, el candidato de Cambiemos.

El sondeo confirma además que el candidato del Gobierno está en un empate técnico con Sergio Massa, que alcanza el 22,7 por ciento de intención de voto. Es decir que la estrategia de polarización del Gobierno no funcionaría en las primarias del 13 de agosto, en las que incluso peligra el segundo lugar para Cambiemos.

Por otro lado, fuentes del gobierno aseguraron a LPO tener un estudio de Isonomía -que trabaja para el jefe de Gabinete, Marcos Peña- que ubica a Bullrich dos puntos arriba de Cristina y a Massa 9 puntos debajo del candidato del gobierno.

Sin embargo, hay todo un debate en torno a cómo se está midiendo a los candidatos de Cambiemos. La semana pasada, LPO publicó el caso de un sondeo realizado por la consultora Aresco, de Julio Aurelio. Ese trabajo mostraba resultados similares a los de la encuesta de Isonomía, con una una relativa paridad entre Cristina y Bullrich.

Pero, las luces amarillas quedaban plasmadas en una pequeña nota al pie que podía verse en la placa que reflejaba la intención de voto de los candidatos a senadores por la provincia de Buenos Aires. "La intención de voto del Frente Cambiemos incluye la estimación del impacto apoyo de Macri y Vidal a su candidatura", se leía. Traducido: Aresco preguntaba por los candidatos de Macri y Vidal y no por Bullrich.