Trasladarán el monumento a Juana Azurduy pero Colón tendrá que esperar
La Legislatura porteña aprobó el traslado de la estatua de Juana Azurduy, pero por ahora el monumento de Cristóbal Colón permanecerá en Aeroparque. La escultura en homenaje a la patriota del Alto Perú estará ubicada frente al Centro Cultural Kirchner y estará acompañada por Juan de Garay.
La iniciativa para reconfigurar la zona aledaña a la Casa Rosada fue enviada por Horacio Rodríguez Larreta recibió 34 votos positivos, dos abstenciones y 18 negativos. Mientras que el monumento al segundo fundador de Buenos aires será trasladado para construir un helipuerto presiencial, mientras que Juana Azurduy se correrá para que pase La Rábida, la avenida que pasa por detrás de Casa Rosada.
El PRO, la Coalición Cívica, Confianza Pública, el Bloque Sindical Peronista y el massismo juntaron 34 votos, suficientes para dar luz verde al proyecto.
La norma autoriza la construcción de hasta dos subsuelos para estacionamiento de automotores y se estipula que las condiciones de seguridad del nuevo helipuerto presidencial deben ser determinadas por la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC).
El massismo presentó ayer un proyecto para que la estatua de Colón se sume a las de Azurduy y Garay, pero esa alternativa parece complicada. "En el PRO dicen que es muy caro el traslado, pero parece que no quieren volver a debatir el destino del monumento después de haber acordado su traslado con el kirchnerismo", explicó un asesor legislativo.
"Deberíamos aprovechar todas la obras que se van a realizar en la zona y traer de vuelta a Colón a su ubicación original", pidió Javier Gentilini. Su propuesta ya tiene el apoyo por los legisladores Maximiliano Ferraro (Bloque Vamos Juntos) y Hernán Rossi (Bloque Suma +). Para avanzar deberá contar con el oficialismo, aunque el proyecto todavía deberá pasar los filtros de varias comisiones.
Con la nueva configuración, la Ciudad sumará 35 mil metros cuadrados de verde en pleno centro. Es un beneficio colateral de la construcción de la autopista ribereña que integrará de manera definitiva Puerto Madero al centro y cambiará por completo la Ciudad.
El nuevo parque se "alimentará" de cocheras de varios edificios públicos -CCK, Libertador- y zonas inutilizadas, además de absorber el helipuerto presidencial y buena parte de la plaza ubicada atrás de la Casa Rosada que en su momento Cristina Kirchner rodeó con rejas.