G20

Trump acordó no mencionar el muro a Peña Nieto y rompió el pacto ante la prensa

Cuando le consultaron si México lo pagaría, le habló bajito a Tillerson: "Absolutamente". Risas entre sus asesores.

Lacumbre del G-20 reveló una vez más las dos dimensiones que habitan en DonaldTrump. El encuentro bilateral con Enrique Peña Nieto fue cordial y controladopor el entorno del presidente de Estados Unidos. "Estamosprogresando", fue la frase con la que arrancó el mandatario la reunión.

Allítambién estaba parte de su equipo. Participaron Gary Cohn -jefe de asesoreseconómicos de buena relación con el canciller y hombre fuerte del gobiernomexicano, Luis Videgaray- Rex Tillerson y Wilbur Ross. En un momento también sesumó el yerno Jared Kushner. Del lado mexicano estaba el secretario de Economía,Ildefonso Guajardo y el subsecretario Carlos de Icaza.

Segúnexplicó el propio Videgaray, los temas que dominaron la conversación fueronseguridad y comercio. Hablaron con tranquilidad durante unos 40 minutos. En esemomento se acordó que no habría conferencia de prensa en conjunto y sóloposarían ante las cámaras al final de la reunión.

Lareunión era una de las bilaterales más esperadas del G20 de Hamburgo, porqueprecisamente por las diferencias por el muro, al inicio del mandato delrepublicano Peña Nieto suspendió de manera unilateral una visita a la CasaBlanca ya agendada.

Cuando un periodista de AP le preguntó si mantenía que México iba a pagar el muro, Trump le dio la espalda a Peña Nieto y mirando a Tillerson murmuró, pero de manera audible: "Absolutamente".

Alsalir de la cumbre, Videgaray apuntó que fue una reunión como la anticipaban:"Cordial y se tocaron los temas que esperábamos. Gran parte del tiempo ladedicamos a hablar sobre las renegociaciones de Nafta", dijo en entrevistacon Radio Fórmula.

Elcanciller se mostró positivo. "Se reconoce que hay avances mutuos",explicó. Y ejemplificó con una idea nueva que surgió en el encuentro:"Queremos explorar juntos la posibilidad de generar nuevos mecanismos demigración para trabajadores agrícolas, que puedan trabajar en Estados Unidos,entrando y saliendo de manera legal".

Porsupuesto, no podía faltar la picardía -por no llamarla trampa- de Trump. Altérmino del encuentro, un reportero de la agencia AP que ingresó con lascámaras le preguntó a Trump a los gritos si efectivamente México pagaría por elmuro. El magnate murmuró -pero de manera audible-: "Absolutamente".

Nohace falta recordar que es el tema que más tensiona la relación con Peña Nieto.Con más cintura, Videgaray aseguró que ni él ni EPN escucharon esa respuesta."Lo ha de haber dicho muy bajito. Lo importante es que no fue un tema quese abordara en la reunión por que es claro que tenemos diferencias alrespecto", señaló el titular de Relaciones Exteriores.

Efectivamente,el video de ese momento muestra que Trump espera algunos segundos pararesponder a la pregunta de la periodista, y cuando lo hace es través de murmulloy mirándolo a Rex Tillerson, su secretario de Estado. Una jugada de barrio parael originario de Queens, que vuelve a apostar por estos atajos callejeros paraincomodar a sus interlocutores. Ejemplos sobran.

Videgaray le explicó a Kushner que una mención de Trump del muro a Peña Nieto podía no sólo descarrilar la relación con México, sino además favorecer la consolidación de líderes anti Estados Unidos como López Obrador.

Comoadelantó La Política Online, Videgaray le había pedido a Kushnerque Trump no mencionara el muro en la cumbre bilateral, lo cual se estabacumpliendo hasta el momento. El problema es que el Trump público y mediático esincontrolable y la pregunta de AP fue su oportunidad de mostrarse políticamenteincorrecto. Como le gusta.

Lasnegociaciones para que se concretara la bilateral de Trump y Peña Nieto empezaronempujadas por por John Kelly y James Mattis y apuntaban a centrarla enseguridad y migración. Pero en la noche previa, LPO pudo confirmar que elcanciller Luis Videgaray habló por teléfono con Kushner, para asegurarse que eltema del muro no se tratara.

RexTillerson propuso la reunión con Trump a Peña Nieto en su primer viaje a Méxicocomo secretario de Estado. En esa ocasión Peña rechazó la invitación y lacondicionó a que Trump fuera "respetuoso con México y los mexicanos".

Videgarayle pidió lo mismo a Kushner en las últimas horas aunque ahora, ya se conoce, elasesor está en temas mucho más complejos que la relación con México como es lapaz en Medio Oriente y temas muy complejos de política interna.

Elcanciller mexicano enfatizó que comentarios sobre el muro podrían no solodescarrilar la relación con México sino que solo sirven para potencian opcioneselectorales presuntamente anti Estados Unidos, en una clara referencia a AndrésManuel López Obrador, candidato de izquierda que hoy encabeza las encuestaspara las presidenciales mexicanas del año próximo.