Alfonsín quiso desafiar al radicalismo y perdió la votación por la presidencia de la convención
Quizás la mística peronista que irradia la ciudad de Berisso irritó a Ricardo Alfonsín durante la convención provincial de la Unión Cívica Radical del sábado. El diputado, que lidera uno de los tres sectores del partido en la provincia, pateó el tablero durante las horas previas al cónclave, cortó el diálogo y pidió una votación para establecer quién se quedaba con la presidencia de la convención, enterrando toda posibilidad a una salida consensuada.
Su derrota fue estrepitosa y el que se alzó con el triunfo fue sector que lidera el diputado provincial Maximiliano Abad, que logró juntar un tercio de los convencionales, duplicando el numero obtenido por el Alfonsín.
En rigor, en esa compulsa no participaba el sector de Daniel Salvador. En los días previos el debate se centró en los tres lugares importantes que se disputaban en la convención provincial. Estos eran: la vicepresidencia de la convención nacional partidaria, lugar reservado para la provincia de Buenos Aires; la presidencia de la convención provincial, órgano vital en la política de coaliciones; y la presidencia de la junta electoral.
En los días previos a la convención nacional que se realizó en La Plata, el vice gobernador había priorizado el ámbito nacional y solicitó quedarse con la vicepresidencia de la convención nacional. La persona designada por Salvador fue el bonaerense Agustín Campero.
Miguel Bazze.
De este modo, quedaba en discusión los otros espacios provinciales: la presidencia de la convención bonaerense y de la junta electoral. La disputa surgió en las horas previas cuando tanto Abad, como Alfonsín quisieron ir por la presidencia de la convención. ¿El motivo? la importancia de ese órgano para las definiciones políticas del partido.
Lo llamativo fue que fue el propio Alfonsín quién cortó el diálogo y desafió a Abad a que la presidencia quedaría para quien junte mas convencionales se quedaría con la presidencia.
La derrota del Morena de Alfonsín no hizo más que exponer en plena convención la fragilidad del diputado. "Una derrota consensuada, sin llegar a una votación, pasaba más desapercibida", explican desde el radicalismo. Como titular de la convención quedó Pablo Barrena (de Lobería).
La convención provincial cuenta con 11 miembros, el espacio de Abad tiene tres (presidencia incluida); el Morena de Alfonsín tiene tres; y el espacio de Salvador cuenta con cinco miembros.
La junta electoral está conformada por cinco miembros: Alfonsín tiene el presidente y tanto Salvador como Abad tienen dos miembros cada uno.
En el radicalismo destacan un dato importante respecto de la composición de ambos cuerpos: ningún espacio cuenta con mayoría propia, por lo que para todo tipo de definición de asuntos partidarios es necesario lograr consensos.