Estados Unidos

Macri se junta con Ryan, en una jugada que apunta a equilibrar la foto con Trump

El líder de la Cámara de Representantes es un republicano mas previsible que el temperamental presidente.

La visita del presidente Macri a Washington para reunirse con Donald Trump, sumó este martes dos encuentros claves, que servirán para darle cierta contención política a la gira y que no quede sujeta a los imprevisibles cambios de humor del magnate.

La Cancillería finalmente logró garantizar que los líderes del Capitolio recibirán a Macri, en dos encuentros bipartidistas. Luego de almorzar este jueves con Trump, un grupo de senadores recibirá a Macri en el Stron Thurmond Room del Capitolio.

Allí lo recibirá Mitch McConnell el republicano de Kentucky que lidera la bancada mayoritaria, pero también estará el líder del bloque demócrata, el neoyorkino Charles Schumer; así como el presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores, Bob Corker.

Luego de ese encuentro se trasladará a la cámara baja, donde lo recibirá el presidente -Speaker-, Paul Ryan, acompañado por la combativa líder demócrata, la californiana Nancy Pelosi, entre otros representantes.

Ryan es hoy visto casi como un enemigo por la administración Trump, luego de que fracasara de punta a punta en su intento de derogar y reemplazar el Obamacare, promesa de campaña central del magnate.

Ambos líderes arrastran una relación muy complicada desde la campaña, cuando Ryan primero dijo que nunca apoyaría a Trump y luego se desdijo. Además, este republicano muy conservador, pero aceptado miembro del establishment de Washington, suele ser el blanco favorito del ala más radical del trumpismo, que encarna el ideólogo Stephen Bannon, hoy marginado, pero todavía en la Casa Blanca.

Bannon en una reunión con Trump.

En tanto que el veterano McConnell del Senado, con un perfil más bajo que el de Ryan -que no oculta sus ambiciones presidenciales-, también tuvo chispazos con la administración de Trump, que es vista por la mayoría de los líderes republicanos como inexperta e impredecible.

Estos encuentros no son habituales. En sus anteriores visitas a Estados Unidos, Macri no fue recibido por los líderes del Capitolio y tampoco ocurrió en su momento con Cristina Kirchner. Quien si logró que lo recibieran las dos cámaras completas fue el israelí Benjamín Netanyahu, justo cuando Obama endurecía su posición hac ia Israel.

La reunión con Rayn y McConnell es una jugada interesante de la Casa Rosada que le quita personalismo a la relación con Estados Unidos y acaso busca generar un vínculo más institucional.

Atendiendo a la complicada relación de Macri con Trump, desde las discusiones de negocios en los ochenta al apoyo de Macri a Hillary-, no parece una mala idea.