Fútbol

Tinelli renunció a la AFA, acorralado por Tapia

Además se pidió una licencia de 18 meses en San Lorenzo. "Siento la necesidad de alejarme del fútbol", afirmó.

 Marcelo Tinelli se alejó este lunes del fútbol, al renunciar a la vicepresidencia de Selecciones de la AFA y tomarse licencia por 18 meses como vicepresidente de San Lorenzo, invocando cuestiones de salud.

La decisión se da en el marco de una intensa guerra fría con el nuevo presidente de la AFA, Claudio "Chiqui" Tapia, quien se le metió en el manejo de la Selección Argentina y la relación con las estrellas del combinado. LPO ya había anticipado que el conductor de Show Match, fue el gran derrotado en el nuevo esquema de poder del fútbol argentino.

Tan acorralado había quedado por la troika que armaron Angelici, Moyano y Tapia, que Tinelli incluso buscó el respaldo de Lilita Carrió, como también reveló este medio.

Entre otras frustraciones, el conductor también vio que la Superliga se demoraba y con eso perdía sentido toda su apuesta a construir un polo de poder propio en la AFA.

"Hoy es un día muy especial para mi. Después de muchos años, siento la necesidad de alejarme del mundo del fútbol por un tiempo. Lo más importante es la salud, y algunos episodios que sucedieron en estos últimos días precipitan esta decisión", sostuvo Tinelli como explicación de su paso al costado, en una carta que publicó en Facebook.

"He decidido renunciar a mi cargo de Vice Pte de Selecciones de AFA, a mi cargo de Coordinador de Estatutos y Convenio de colaboración con AFA en nombre de la Súperliga, y solicité una licencia de 18 meses en mi cargo de vice Pte de mi amado San Lorenzo", completó el conductor.

Lo cierto es que Tinelli creía que iba a tener el total y absoluto manejo de la Selección Argentina, para desde ahí ir adjudicándose los logros de Messi y compañía a nivel personal mientras se posicionaba fuerte en Europa y hasta quizás con los ojos en la FIFA, confirmaron a LPO allegados al conductor.

Sin embargo, Tapia y Angelici lograron neutralizarlo, aprovechando la enorme desconfianza de Macri con el conductor.

Acostumbrado a ser el centro de atención y quien da las órdenes, Tinelli ya se vio frustrado cuando tuvo que sentarse a la mesa de la nueva conducción de la AFA como un "invitado". Su cara lo decía todo al ver que los saludos y los mimos del mundo fútbol eran para el elegido Tapia.

El plan original del grupo que se apoderó de la AFA era incluso desbancar a Tinelli apenas asumiera Tapia, porque el reglamento no le permitía estar en Selecciones. Pero como el animador fue haciendo las paces con el correr de los días previos, decidieron mantenerle la palabra e incluso proponerlo para comandar la Superliga, pero en Viamonte 1366 era un secreto a voces que el conductor no iba a mandar.

Después, el presidente de la AFA y sus aliados decidieron echar al Patón Bauza de la Selección -un protegido de Tinelli- y el conductor tuvo que poner la cara por una decisión que no había tomado y encima justificar el despido del entrenador que sacó campeón a San Lorenzo de la Libertadores.

Enojado por esos manejos, Tinelli no aguantaba más y ya analizaba tirar la toalla. Como primera medida se bajó del viaje que Tapia hizo a Europa en busca de nuevo DT y para charlar con algunos jugadores. 

Angelici, Tapia, Moyano, la troika que acorraló a Tinelli.

Además, su status de megaestrella nacional le volvía incómodo bajar al barro de exigente puja cuerpo a cuerpo entre dirigentes que le planteaba Tapia y mucho menos compartir viajes a Europa para exponerse ante los medios, junto a un rival que en el fondo no considera a su nivel, confirmaron a LPO las fuentes consultadas.

Por eso decidió bajarse. Por eso funcionó el plan que Tapia y el Tano Angelici labraron a mano y sin ansiedad. Sabían que Tinelli estaba rodeado, que en el único lugar de la AFA en el que se iba a sentir cómodo era tratando con Messi y otras megaestrellas como él. Y también sabían que no lo iban a dejar mandar como él pretendía.

Para peor, sus roces en este último tiempo con Rodoldo D'Onofrio, titular de River y su fiel ladero, y Matías Lammens, presidente de San Lorenzo, por haber apoyado la elección de Tapia, lo llevaron a otra encrucijada, y de ahí que además haya tomado una licencia por 18 meses en el club de sus amores.

Así, el sueño del conductor de Showmatch quedó deshecho. Quiso entrar por la Selección para colgarse alguna medalla y ganar terreno sobre el resto en la AFA, pero el plan fracasó.