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El paro en el transporte es contundente y el gobierno logró desalojar un piquete en Panamericana

La medida de la CGT paraliza la actividad. Las fuerzas de seguridad desalojaron un piquete en Panamericana.

El primer paro general contra el gobierno de Mauricio Macri tieneun impacto total en el transporte público, ya que desde el primer minuto del día no funcionan colectivos, trenes, subtes ni aviones. 

Esta mañana la mayor tensión estaba centrada en los piquetes que grupos de izquierda realizan en el acceso al Puente Pueyrredón (mano a Capital Federal), en inmediaciones de Puente La Noria (Lomas de Zamora), en el cruce de la autopista Panamericana y ruta 197 (Tigre), en la esquina de Acceso Oeste y avenida Vergara (Hurlingham), y en la subida a la autopista Buenos Aires-La Plata (en la capital bonaerense), entre otros puntos. 

En esos lugares, el Gobierno desplegó a las fuerzas federales y había extrema tensión con los manifestantes, con algunos incidentes por ahora aislados. La orden de la Casa Rosada era garantizar al menos uno o dos carriles para la circulación.

En el corte de Panamericana y ruta 197, alrededor de las ocho de la mañana la Gendarmería avisó que despejaría la circulación y poco después avanzó sobre los manifestantes para liberar carriles, en medio de algunos empujones y escaramuzas. 

Los choques en la Panamericana.

Mientras tanto, por los medios la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, advertía que las fuerzas nacionales aplicarían el protocolo antipiquetes. "Se les ha advertido a los manifestantes que queremos que liberen la Panamericana, que dejen circular a la gente, y ahora se pone en marcha el protocolo de la Gendarmería y, si no responden, actuarán. Actuar significa desalojar para que la gente pueda trasladarse no solo por las vías laterales sino por la vía central", afirmó.

En ese momento, los manifestantes liberaron un carril ante un fuerte despliegue de gendarmes. Pero una hora después la situación la situación se descontroló y los gendarmes avanzaron con gases y carros hidrantes para liberar toda la Panamericana. Los manifestantes respondieron con palos y piedras, y hubo algunos detenidos.

Por el caos que se generó en la zona, el tránsito hacia la Ciudad de Buenos Aires quedó interrumpido, mientras los gendarmes buscaban reordenarse para evitar que los manifestantes vuelvan a cortar la autopista, algo que no consiguieron. Minutos después el grupo se fue para participar de la movilización en el Obelisco. 

Según la agencia DyN, seis manifestantes fueron detenidos y cuatro resultaron heridos.

"Un éxito"

En las primeras horas del día, la CGT festejó el éxito del primer paro general contra el gobierno de Macri. "El paro es un éxito, ha mostrado en todo el país la disconformidad con la política económica del Gobierno", celebró Carlos Acuña, integrante del triunvirato de la central.

La estación de Retiro, vacía

Más allá de la cortes, la imagen de la casi paralización en la Ciudad de Buenos Aires era contundente. No funcionan colectivos, trenes ni subtes. Al respecto, elsecretario general de la UTA, Roberto Fernández, dijo que el acatamiento es total: "Lo nuestro es cien por cien, tanto en Capital, en el Gran Buenos Aires como en el interior".

En la Ciudad de Buenos Aires, penas circulan algunos taxis, sin que se registraran por ahora incidentes con el gremio de Omar Viviani, tras sus polémicas declaraciones. Por lo tanto, el movimiento en la capital es casi exclusivamente de autos particulares, aunque con un flujo claramente menor que cualquier día normal.  

Asimismo, desde anoche estaba completamente paralizada la actividad en los aeropuertos de Ezeiza y Aeroparque, a excepción de algunos vuelos que debían llegar después de la medianoche. Tampoco había micros de larga distancia.

Los dirigentes gremiales discreparon sobre los piquetes, el tema con el que el Gobierno nacional trató de monopolizar la discusión para restarle trascendencia al paro. Mientras Acuñajustificó los cortes porque se trata de "desocupados", Fernández dijo que no le "gusta nada porque arruinan todo, es muy feo". 

La estación de Temperley vacía.

"Siempre los empresarios son los que hacen los negocios, se llevan la plata afuera y después los malos son los que hacen los piquetes; los que hacen los piquetes son producto de la necesidad, del hambre", defendió Acuña.