El kirchnerismo denunció 40 posibles casos de conflictos de intereses
Los diputados del Frente para la Victoria exhibieron un powert point con el detalle de 40 funcionarios con posibles conflictos de intereses, como se denomina a quienes vinculen negocios personales con sus tareas en el Gobierno, que llegarían a 80 contabilizando dirigentes con cargos menores.
"Todos tienen presunción de inocencia pero hay 16 que ya están imputados", dijo Héctor Recalde, jefe del bloque y a cargo de exhibir las imágenes en un proyector, práctica poco frecuente en el kirchnerismo.
Entre los ya imputados están el propio Mauricio Macri por el acuerdo del Correo Argentino y la licitación de Avian, el secretario legal y técnico Pablo Clusellas (por Avian), el jefe de asesores Pablo Torello (por la licitación de Flay Bondy y Avian), el coordinador de Gabinete Mario Quintana (Avian y por comprar dólar futuro antes de la devaluación) y el ministro de Finanzas Mario Caputo (dólar futuro).
Juan José Aranguren y varios de sus funcionarios fueron imputados por su cercanía a Shell, el ministro Guillermo Dietrich por las low cost Flay Bondi y Avian (le dedicaron un video explicativo) y el presidente de Ferrocarriles Argentinos Marcelo Orfila, acusado de contratar a una aseguradora de Franco Macri.
Hubo una planilla especial para la familia de Macri, con las empresas que aún posee la familia y mantienen relación con el Estado.
Entre los posibles casos se destaca toda la cúpula de la Unidad de Información Financiera: el titular Mariano Federici (ex FMI) y su vice, la abogada María Eugenia Talarico, ex abogada de HSBC, acusado de presuntos casos de lavado de dinero por la UIF en los últimos años de Cristina Kirchner.
Recalde descreyó de los decretos de la Oficina Anticorrupción para aplicar un protocolo para casos de conflictos de intereses, "porque la ley de ética pública es muy clara".
No coincidió con él Dietrich en su última visita a Diputados cuando dijo que sólo "algunos países" legislan el conflicto de intereses y en Argentina hay "millones de casos posibles", como la contratación de la tripulación de Austral y Aerolíneas en los hoteles de Cristina Kirchner. "Ninguno fue tan claro como ese", se defendió el ministro ese día.