Se complica la interna del PRO en La Matanza y Saredi ya hace campaña solo
Al macrismo le cuesta hacer pie en La Matanza, un distrito clave para disputar las elecciones legislativas de este año, y la situación en el Concejo Deliberante local no ayuda. Es que, por orden de María Eugenia Vidal, hace dos meses los ediles habían anticipado que para febrero habrían concretado la "unidad" de los dos bloques en los que están partidos. Sin embargo, los días pasaron y el acuerdo nunca llegó. "Está muy verde", admiten ahora a LPO.
Mientras Vidal saca cuentas que le preocupan -en Cambiemos, como contó este sitio, estiman estar un millón de votos abajo de los que Mauricio Macri obtuvo en las PASO en la Provincia- intenta ordenar la interna en La Matanza, el distrito con más votantes, donde será clave que el oficialismo mejore su performance en las elecciones de medio término.
Por eso, la gobernadora les había pedido a los ediles que se unieran en el Concejo, donde están partidos en dos espacios, para que las sesiones de este año comiencen con un bloque unificado y Cambiemos se convierta en el segundo espacio político con mayor número de escaños.
Los ediles dieron por hecho esa unidad y en diciembre afirmaron a LPO que sería "un trámite" que se concretaría en una reunión en La Plata durante enero. Pero los días pasaron y la reconciliación entre Cambiemos UNA (integrado por Miguel Racanelli, Mirta Redes, Natalia Ybalo y Abraham Delgado) y Cambiemos Juntos La Matanza (Miguel Calvete e Isabel Barreto) jamás llegó.
Según explican, lo que divide a los concejales es la figura de Miguel Saredi. Aunque en Cambiemos pregonan la unidad e insisten en que hay voluntad de construir un armado amplio que incluya a todos los dirigentes locales, el ex candidato a intendente del PRO fue marginado en los últimos eventos que organizó el sector que quiere instalar al ministro de Educación bonaerense, Alejandro Finocchiaro, como máximo referente del distrito.
Saredi ya hace campaña solo, sin referencia a Cambiemos
Estas diferencias se ven reflejadas en los dos bloques del Concejo. Calvete preside el suyo y responde a Saredi, mientras Racanelli está alineado con Finocchiaro. Sin embargo, las influencias no son del todo lineales y desde el sector de Saredi aseguran que dentro del bloque de Racanelli hay dos concejales (Ybalo y Delgado) que también le responden. En ese sentido, consideran que el ex candidato del PRO tendría la influencia para "romper" el bloque y poner en desventaja a Cambiemos.
Mientras desde La Plata mandan la orden de unidad, en el entorno de Racanelli dicen que el concejal no quiere saber nada con un acercamiento a Saredi. Meses atrás, él mismo había confirmado que los bloques se iban a unir, pero ahora confiesa a LPO que el acuerdo "está muy verde", y afirmó que no habrá unidad salvo que sea "un pedido expreso" de la gobernadora.
El resultado es una interna desordenada, en la que Cambiemos hace esfuerzos por instalar a Finocchiaro -quien tiene voluntad de ser intendente y hace tiempo camina el territorio- pero no terminan de definir la situación de Saredi, a quien saben que no pueden nigunear porque eso les complicaría el armado local, pero tampoco le dan espacio y se olvidan de invitarlo a los actos locales.
Mientras tanto, el dirigente sigue dando muestras de su disconformidad y -aunque jamás reconoce estar con un pie afuera- hace campaña sin mencionar a Cambiemos. Empapela La Matanza con afiches suyos, verdes y sin ninguna referencia partidaria, y desde la oposición local vaticinan que su salida puede ser inminente. Sin embargo, él se ataja al insistir en que no va a romper y recordar que siempre tuvo un perfil bastante "independiente".
Especulan con que si Saredi va a una interna, Cambiemos lo aceptaría con boleta corta, por lo que podría terminar jugando en otro espacio. Mientras tanto, los dirigentes ligados a Saredi amplían sus críticas, piden "ampliar" la convocatoria y manifiestan su "preocupación" por el impacto de la suba de tarifas.