Productores de arándanos desmienten a Macri y dicen que 2016 fue el peor año de su vida
Este mediodía en su discurso inaugural de las sesiones en el Congreso, el presidente mencionó que gracias a las mejoras implementadas en la región del Plan Belgrano, puntualmente por la renovación del aeropuerto de Tucumán, las exportaciones de arándanos habían crecido 58%. Este enunciado se llevó un fuerte aplauso de los legisladores de su bancada, pese a tratarse de un producto que representa aproximadamente el 0,2% de las exportaciones nacionales.
Sin embargo, horas más tarde, desde el Comité Argentino de Arándanos (ABC), organismo que reúne más del 80% de las exportaciones de arándanos, remarcaron que "el aumento del 58 por ciento de aumento de exportaciones desde el aeropuerto de Tucumán no es representativo de lo que sucede en el sector. Entre 2015 y 2016, hubo un incremento en volumen en ventas al exterior alrededor del 15 por ciento, pero comercialmente no fueron buenos los resultados económicos" por la baja del precio internacional y los problemas de competitividad que atraviesan al conjunto de la economía.
De todos modos, los exportadores señalaron que "es muy bueno para los productores de arándanos saber que estamos en la agenda del presidente Mauricio Macri".
Carlos Stabile, presidente del ABC, afirmó que "estamos en sintonía con la propuesta del Gobierno Nacional de que Argentina sea el supermercado del mundo. Pero nuestro sector necesita mejoras concretas para ganar competitividad, haciendo foco en los costos laborales, de producción y logísticos".
"Si bien el año pasado fue récord en el volumen de exportación, no hubo buenos resultados económicos, siendo el peor año producto del bajo precio en los mercados de destino", agregó el productor.
"Los arándanos argentinos pierden terreno en los mercados de exportación por falta de competitividad y esto perjudica enormemente a los productores, principalmente, a los más chicos", indicó el titular de ABC, que nuclea a las regionales del sector, que son la Asociación de Productores de la Mesopotamia (Apama), la Cámara Argentina de Productores de Arándanos y otros Berries (Capab), y la Asociación de Productores de Arándanos de Tucumán (Apratuc).
"Tuvimos un año a nivel climático muy bueno, y si la coyuntura hubiese ayudado el total de toneladas hubiese sido mucho más", agregó.
En 2016 se exportaron 17.000 toneladas de arándanos provenientes de las 1300 hectáreas en el noroeste, las 1050 ha en el noreste y otras 400 en la provincia de Buenos Aires. Para su producción, en 2016 se contrataron cerca de 700.000 jornales.
Stabile destacó el diálogo con el Gobierno y que "nos tengan en la agenda como ejemplo de una industria que busca crecer y posicionarse mundialmente", pero indicó que "hay que trabajar en los costos laborales, de producción y logísticos. También es necesario que se revea toda la política impositiva y de cargas sociales, puntualmente reducir el impuesto al trabajo que es mucho más elevado que el de otros países y nos quitan competitividad".
Además, desde el ABC criticaron la resolución recientemente aprobada por la Comisión Nacional del Trabajo Agrario (CNTA), que reduce las condiciones de trabajo para los cosechadores de arándanos a 25 kilos por jornada: "Desde la Cámara no tuvimos ni voz ni voto en esa normativa y no pudimos negociar. Creemos que se puso un piso para el salario variable, por encima del jornal mínimo y obligatorio, sobre un rendimiento que es bastante bajo y con el cual no podemos competir con otros países", manifestó Stabile, quien sostuvo además que "la resolución de la CNTA es contraria a la publicada por AFIP un día antes, que había determinado que para un jornal la cantidad de cosecha de trabajo son 40 kilos de fruta".