Congreso

El Senado y la Magistratura se acusan mutuamente por la demora para nombrar jueces

Piedecasas reclamó por 14 magistrados, pero le recordaron que los concursos están lentos. Los nombres.

El flamante presidente del Consejo de la Magistratura, Miguel Piedecasas, abrió un debate con el Senado por la tardanza para nombrar jueces, un problema de larga data provoca que muchos tribunales permanezcan por años sin completarse.

Ni bien asumió, pocos días antes de navidad, el bogado radical acusó al Senado de tener 14 pliegos de jueces pendientes, pero olvidó que la mayoría de ellos habían sido envidos casi al mismo tiempo de su asunción.

Molesto, el senador Alfredo Martínez, también radical e histórico miembro de la Comisión de Acuerdos, recordó además que el Consejo de la Magistratura lejos está de aportar a la causa porque tarda cada vez más lento para hacer los concursos.

“Han demorado los concursos tanto, que algunos de los que tratamos en 2016 son de hace dos años y medio” le dijo a LPO. Traducido: su correligionario debería primero poner manos a la obra antes de pedir auxilio al Congreso.

Esos concursos los organiza el Consejo de la Magistratura y de ellos surge una terna, de la cual el Presidente elige a su candidato a juez. Pero recién puede asumir cuando el Senado le otorga acuerdo en el recinto, previa audiencia pública en Comisión, presidida por Rodolfo Urtubey, hermano del gobernador de Salta.

En el Senado sorprendieron las declaraciones de Piedecasas por la buena conducta del salteño los últimos meses. “Arregla todo con Pinedo y no nos enteramos ni en el bloque. Y encima se da el gusto de criticar”, protestaban en Cambiemos.

En su efusiva asunción, Piedecasas había criticado que en los últimos años se elevaron menos jueces que en años anteriores.

“Hasta 2010, el promedio de elevación de ternas fue de 52 por año, pero después de ese año el promedio bajó a 13, con lo cual se acumularon 200 ternas sin elevar y por ende igual cantidad de vacantes a cubrir”. Pero para Martínez la culpa fue del mismo Consejo, por demorar los concursos.

El año pasado se aprobaron 38 pliegos, una mejora respecto a los años anteriores. Pero el Consejo no quedó conforme, “la gestión no logró el resultado deseado, de 50 ternas de promedio” manifestó Piedecasas. También reprochó al Ejecutivo por mantener 22 designaciones pendientes.

Lo más curioso es que de los pliegos que ingresaron al Senado solo dos fueron demorados mientras que el resto llegó pocos días antes de fin de año. “Como no estaba en el temario de extraordinarias, no pudimos tratarlos”, aseguró el senador radical.

Uno de los que podía tratarse era de Gustavo del Corazón de Jesús Fresneda, candidato a juez de primera instancia de Paso de Los Libres, Corrientes.

Llegó al Senado en 2015 por gestión en la Magistratura del gobernador de Corrientes Ricardo Colombi, que contaba allí con su diputado Gustavo Valdes en la Magistratura. Pero Cristina Kirchner la retiró cuando Valdés no la ayudó a desplazar a los auditores judiciales.

Con Macri en la Casa Rosada el pliego volvió pero nunca se trató. Otro pliego que los senadores congelaron es el de Julio César Castro, por una causa que tal vez Piedecasas desconozca: fue acusado por abuso sexual.

Macri, a su vez, pidió revisar los pliegos de Silvia Susana Santos y Graciela Haydee Avallone, ambas para ser magistradas en juzgados de trabajo de Capital Federal.

El presidente propuso a Claudio Fabián Loguarro para el otro juzgado vacante de trabajo en la Ciudad. También a Alberto Daniel Carelli y María Paula Marisi para el tribunal oral de Mendoza y a Javier Pico Terrero, Marcelo Gota, Silvina Andrea Bracamonte para el juzgado civil y comercial de Capital Federal.

En tanto que el acuerdo de Aníbal Pineda y Eduardo Daniel Gottardi también está pendiente, como vocales en la cámara de apelaciones de Rosario y la de apelaciones en los civil y comercial de Capital Federal, respectivamente.

Si Macri tiene el mismo apuro que Piedecasas podría resolverlo mandarlo un pedido de extraordinarias. Pocos lo imaginan.