Estados Unidos

Diplomacia de billonarios: Trump se reunió en secreto con Slim

El encuentro podría ir más allá del deshielo entre el republicano y el empresariado mexicano.

 De manera oficial, el gobierno ha mantenido una postura de esperar a conocer bien el plan de acción que tendrá el futuro presidente de Estados Unidos, Donald Trump, antes de actuar, sin embargo, recientes acercamientos con personajes claves del sector empresarial y político de México hacen pensar que Enrique Peña Nieto no se ha quedado del todo cruzado de brazos.

La Política Online relató los encontronazos en el gabinete ante la propuesta de Luis Videgaray por preparar un encuentro abierto entre el republicano y el mandatario mexicano antes del 20 de enero, lo que causó desencuentros entre los mismos que se opusieron a aquella reunión ocurrida a finales de agosto, que tantas críticas se llevó y le costó su lugar en la secretaría de Hacienda a Videgaray.

Sin embargo, la incertidumbre y el temor continúan permeando el ambiente, por ejemplo, en el sector empresarial nadie está tranquilo y se preparan para defender sus intereses de abrirse una discusión por el TLCAN.

En anterior entrevista con LPO, el representante del partido Republicano en México, Larry Rubin, también señaló la imperante necesidad de que ambos gobiernos se reúnan lo antes posible, en tanto que en el sector académico mantienen sus dudas al respecto.

En ese escenario, resalta con creces que este sábado cenaron juntos el presidente electo de Estados Unidos y el empresario mexicano Carlos Slim en Florida, en un exclusivo club de golf, como limando asperezas luego varios desencuentros durante la campaña del republicano.

La reunión fue reportada primero por el diario estadounidense The Washington Post y posteriormente fue confirmado por el yerno de Slim, Arturo Elías Ayub, a través de su cuenta de Twitter.

La primera mirada de este encuentro fue sin duda el de un intento claro de acercamiento entre Trump y la élite empresarial mexicana.

"El encuentro entre Slim y Trump es una gran señal para México y la relación entre ambos países. Ello indica que Trump ve con mucha importancia a México", opinó al respecto Larry Rubin, uno de los candidatos para embajador de Estados Unidos en México.

Agregó en diálogo con LPO que es una señal de que la relación entre el republicano y el sector empresarial será de apertura.

Pero desde una segunda lectura surgen preguntas si ello también forma parte de una maquinaria extraoficial por parte del gobierno mexicano para comenzar a tejer un puente con el próximo gobierno estadounidense, que en campaña golpeó con fuerza a nuestro país.

Hay varias pistas para pensar lo anterior. El ex secretario de Hacienda y Crédito Público sigue jugando un papel clave para la construcción de un puente entre ambos gobiernos. La cuestión es que se mueve de una manera no oficial, es decir, sin ostentar un cargo dentro del gabinete.

Ayer precisamente, el columnista Raymudo Riva Palacio, trascendió en su espacio publicado en el diario El Financiero que por instrucciones del presidente Peña Nieto, Videgaray estableció un nuevo contacto con Jared Kushner, el yerno de Trump, el pasado noviembre, comenzar a ver y acordar los términos sobre los cuales se retomará la relación bilateral, negociando detalles como, por ejemplo, quiénes serían los funcionarios de los dos gobiernos encargados de tejerlas.

Sobre esa perspectiva, Rubin reiteró su posicionamiento de que es necesario que se establezca lo más pronto posible los lazos entre el equipo de Trump y el gobierno federal, por lo que consideró que estos encuentros sin duda allanarán el camino para que este encuentro se concrete a la brevedad, que él mismo se encuentra pugnando y por lo cual ayer se reunió en la Cámara de Senadores con Pablo Escudero y próximamente sostendrá una reunión con diputados.

"Yo espero que estos encuentros ocurran con mayor fuerza, no sólo con el sector empresarial sino también a nivel político", apuntó.

Por lo pronto han quedado fuera de la jugada quienes serían los encargados oficiales de realizar estos encuentros, como la propia Ruiz Massieu o el secretario de Economía, Ildefonso Guajardo y por ahora parece que se apuesta a una jugada por lo bajo, en tanto que Trump no asuma oficialmente su papel en la Casa Blanca.