Mendoza

Cornejo benefició en el presupuesto a intendentes amigos y ya aparecieron las primeras críticas

Los más beneficiados con obras son dos radicales y un macrista. Los peronistas mandaron a decir que fueron “extorsionados”.

“Decía que era diferente, pero no”. Amargo, con resignación, así fue la queja de un intendente peronista mendocino a la hora de analizar lo que le tocó en la pauta de gastos del año que viene que aprobó este martes el Senado provincial, en tiempo récord, con el apoyo de amplios sectores de la oposición.

Alfredo Cornejo, que ha confirmado ser un muy hábil negociador cuando es necesarios, pero también un animal político de sangre fría, logró el presupuesto que quería, con el permiso para endeudarse por lo que quiere y el reparto de fondos para obra pública que diseñó.

Así, de los 66.000 millones de pesos que el Estado mendocino gastará el año que viene, la deuda será de unos 3.700 millones, muy manejable, y los fondos para los municipios 2.149 millones de pesos, de los cuales el 44% se lo llevarán tres intendentes amigos.

Se trata de los jefes comunales de Luján, Omar de Marchi, macrita de la primera hora, con 446 millones de pesos; Walter Marcolini, de General Alvear, con 284 millones, y Rodolfo Suárez, de Capital, con 220 millones.

Este reparto generó malestar en las filas del peronismo, ya que Cornejo operó justamente con los intendentes apoyo para poder sacar rápido el presupuesto a cambio de fondos.

Pero de todas maneras, las comunas peronistas quedaron lejos en el reparto, con 149 millones para San Martín, 104 millones para San Rafael y 72 millones de pesos para Lavalle.

El malestar lo hizo público el ex senador nacional peronista Adolfo Bermejo, cuyo hermano, Alejandro, es intedente de Maipú. En su cuenta de Twitter acusó: “Mendoza tendrá presupuesto, pero no hay visión de futuro. El Gobierno provincial se abusa de los intendentes y sus urgencias”. La queja se entiende porque su municipio quedó en el puesto 16 de 18 en el reparto de fondos, con apenas 40 millones de pesos, discriminados de la siguiente manera: 24 millones para obras, 8 millones para infraestructura social y otros 8 millones para rutas.

El cacique que habló con LPO dejó en claro que Cornejo es un hábil negociador, pero a la hora de que se acaban los argumentos para seducir, no duda en imponerse. “Y está bien, nosotros hicimos lo mismo, por qué ahora va a ser diferente, si todos apoyan a los suyos”, se resignó el jefe comunal, mientras sacaba cuentas de cuánto menos que a otros le tocó en suerte.