Santa Fe

Estallaron las internas en el socialismo por la megacausa contra el lavado de Rosario

Tres ex ministros de Binner y Bonfatti fueron designados como defensores de los acusados y estalló Lifschitz.

La euforia en el socialismo por los resultados del megaoperativo que resultó con once detenidos, la mayoría del establishment rosarino, duró pocas horas hasta que los funcionarios de primeras líneas se enteraron que tres ex ministros se constituyeron como abogados defensores de algunos de los detenidos.

Se trata de los ex ministros de Justicia, Héctor Superti y Juan Lewis y el de Seguridad, Daniel Cuenca. Los dos primeros con funciones en la Legislatura hasta que se conoció la noticia y el diputado Rubén Galassi -de quien dependía Lewis- le pidió la renuncia, lo mismo habría ocurrido con Superti.

Las designaciones cayeron como balde de agua helada en el gabinete del gobernador Miguel Lifschitz al punto de empañar lo actuado: "No lo podía creer, luego de dos años de investigaciones y de convertirnos en la primer provincia que muestra resultados concretos contra el lavado, vienen estos tipos y hacen esto", mascullaba bronca un alto dirigente socialista en diálogo con LPO.

Es que Superti, además del abogado personal del ex gobernador Antonio Bonfatti, que como tal impulsó un cuestionado juicio abreviado por la balacera que sufrió el mandatario en su domicilio, fue el "arquitecto" de la Reforma Procesal Penal que rige en la provincia de Santa Fe.

Dos ex ministros de Justicia de los socialistas Binner y Bonfatti y uno de Seguridad se presentaron como defensores de los acusados por lavado del narcotráfico, lo que generó la furia de su compañero de partido y gobernador, Miguel Lifschitz.

"Esto les pasa a los socialistas por haber terciarizado la reforma judicial en técnicos y perfiles universitarios" reflexionó en conversación con LPO el periodista rosarino Raúl Acosta quien agregó que "la inteligencia no da códigos, la universidad no enseña de ética política".

Desde la oposición lo señalan como el principal operador en la justicia: "La gran mayoría de los jueces y fiscales nombrados por el nuevo sistema tenían alguna vinculación con Superti. Cuando se enviaron los pliegos a la Legislatura tuvimos que recusar como a 70" afirmó en off una legisladora del PRO a LPO.

En el mismo sentido, el diputado del macrismo, Roy López Molina, expresó en un comunicado que “es paradójico que quienes impulsaron y reformaron el sistema penal de la provincia de Santa Fe sean los que defienden ahora a estos ladrones de guantes blanco"

"Todo indica que los imputados buscan, a través de la defensa de los ex ministros, salvarse de que recaiga sobre ellos la Ley” consideró el legislador.

Además, tanto Superti como Lewis estaban designados en la Legislatura como asesores de la presidencia del cuerpo a cargo de Bonfatti, o sea, que al momento de asumir la defensa eran funcionarios públicos.

Rápido de reflejos, el ex ministro Rubén Galassi le pidió la renuncia a Lewis y se cree que Bonfatti hizo lo propio con Superti.

La interna a flor de piel

Si bien las diferencias entre Miguel Lifschitz y Antonio Bonfatti se hicieron más visibles con el correr de los meses, la megacausa por lavado y asociación ilícita que comprometió a importantes personalidades rosarinas las exhibió en toda su dimensión.

"No son dirigentes del Frente, son funcionarios que ocuparon un lugar en la gestión anterior" fue la respuesta contundente del gobernador para diferenciarse, aclarando luego que "en lo que hace a nuestro gobierno ninguno de ellos tienen ninguna relación".

"Tiene que ver con la ética política, tenemos que ser claros en eso, tenemos que estar de un lado o del otro en lo que es la lucha contra el narcotráfico, contra la violencia y también contra la corrupción en todas sus formas y en todos sus niveles, me parece lamentable", definió Lifschitz en relación a los ex ministros que decidieron defender a los acusados de lavado mientras la justicia investiga conexiones con el narcotráfico.

El gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz.

En otro momento de la conferencia el gobernador afirmó que "yo trato de hacerme cargo y de responder por mis actos de gobierno y los de mi equipo y en eso tengo absoluta tranquilidad de donde estamos parados y cuál es nuestra actitud frente a los problemas"

"No tenemos ningún tipo de temor para enfrentar todos los hechos que haya que enfrentar en materia de narcotráfico, de corrupción, de defraudación, de lavado o lo que fuere. Si no ponemos límites y no atendemos las demandas de los ciudadanos que nos están pidiendo actitudes claras, actitudes éticas, actitudes valientes también, me parece que estamos defraudando la credibilidad publica."

Por otra parte, se refirió a las designaciones en la Legislatura de los ex ministros Superti y Lewis "entiendo que su situación de relación de dependencia en la Legislatura ha sido dada por cerrada".

Ante la pregunta de un cronista sobre las funciones que ejercían estos funcionarios, se limitó a contestar que "habrá que preguntarle al presidente de la Legislatura" pasándole la pelota a Antonio Bonfatti quien preside la Cámara de Diputados y responsable de los nombramientos.

"Nosotros priorizamos el compromiso político sobre lo técnico porque eso lleva implícita una ética de reconocimiento de la dignidad humana que creemos que es esencial y que ha marcado la coherencia en el Socialismo" sostuvo en diálogo con LPO Marcial Sorazábal, presidente de la Juventud del partido de la rosa.

Es que este sábado se desarrolló el encuentro nacional anual de jóvenes socialistas en Rosario con más de 500 participantes cuya apertura estuvo a cargo del mismo gobernador mientras que para el cierre estaba prevista la presencia de Antonio Bonfatti, quizá, tomando prudente distancia.