El peronismo dejó de lado su interna y se unificó en el rechazo al decreto de Macri que triplicó la coparticipación federal a la Ciudad de Buenos Aires.

Esta tarde los diputados del FpV Héctor Recalde y Julio De Vido reunieron a emisarios de todos los gobernadores para discutir una embestida contra el presidente.

El encuentro fue improvisado y en pleno enero pero según anunció De Vido y Recalde tuvo a funcionarios de Río Negro, Catamarca, Chubut, La Pampa, Formosa, Entre Ríos y Chaco.

Los diputados FpV contaron que la mayoría de los gobernadores enviaron a funcionarios de Economía, pero otros prefirieron ser presentados por los fiscales de Estado, con la intención de ir diagramando una estrategia judicial conjunta.

La unión del kirchnerismo duro y los gobernadores era impensada hace una semana, cuando estos últimos punteaban un sub bloque en Diputados y le daban la espalda a los senadores camporistas que cuestionaron los despidos de Gabriela Michetti.

No sólo eso. Entre los mandatarios que respondieron a la convocatoria estuvieron quienes enfrenaron al kirchnerismo hasta hace 40 días, como el pampeano Carlos Verna y el chubutense Mario Das Neves. Ambos enviaron legisladores para dar un respaldo.

“La Constitución habla de repartir la coparticipación con criterios de equidad y solidaridad y darle prioridad al desarrollo, calidad de vida e igualdad de oportunidades”, recordó Recalde, que es diputado por la ciudad de Buenos Aires, pero remarcó que su distrito es el de mayor ingreso per cápita del país.

La embestida judicial que programan los gobernadores se basaría en la violación de esa parte de la Carta Magna. El mismo argumento planea usar los diputados para autoconvocarse a sesiones extraordinarias.

Claro que necesitan llegar a 129 y el FpV con aliados no supera los 110, aunque para este tema confían en ayudas de referentes de izquierda y de los gobiernos provinciales como San Luis, Santa Fe y Chubut.

Y hasta intentan fracturar el Frente Renovador a través de Felipe Solá, quien en la primera reunión de su bloque les aclaró a sus pares que no será contemplativo con Mauricio Macri, como lo está siendo Sergio Massa.

“Es plata para pagar deuda”

Axel Kicillof, también porteño, fue el otro diputado que fundamentó el rechazo a triplicar la coparticipación a su distrito.

Lo hizo con números finos: denunció que sólo 9 de los 19 mil millones de pesos que engrosarán las arcas de la Ciudad de Buenos Aires será financiar los 20 mil policías de la Federal, mientras que el resto es para cancelar deuda externa contraída por Macri como jefe de Gobierno.

“Venimos diciendo que Macri se endeudó en dólares como jefe de Gobierno. Este año la Ciudad tiene 800 millones de dólares de vencimiento y lo van a pagar con este aporte”, sostuvo Kicillof.

“Es una transferencia sin ninguna justificación a la jurisdicción más rica del país, mineras se reducen los recursos de todas las provincias”, agregó.

Cuestionó además que la provincia de Buenos Aires se haya endeudado en 60 mil millones de pesos para cerrar sus cuentas. “Macri le dice a todos los gobernadores que no hay plata para las provincias y que tienen que tomar deuda”, protestó el ex ministro.

De Vido no se quedó atrás: “Se está federalizando la amortización de la deuda de la Ciudad”, dijo y pid que no sean saqueados los fondos federales que le corresponden al interior del país”,

La unidad peronista contra este decreto se completó con una reunión entre los jefes de los bloques del FpV, Recalde y Miguel Pichetto, en la que exigieron la urgente convocatoria a gobernadores para discutir sobre coparticipación. “Decían que había diferencias, pero estamos juntos”, bromeó el diputado.