Cristina Kirchner extendió las sesiones ordinarias del Congreso nacional hasta el último día de su mandato, el 9 de diciembre, un día antes del recambio presidencial.

"Prorróganse las Sesiones Ordinarias del Honorable Congreso de la Nación hasta el 09 de diciembre de 2015", indica el decreto 2329/2015 publicado hoy en el Boletín Oficial, que lleva la firma de la Presidenta y del jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

La extensión de las reuniones ordinarias del Congreso estipula que las cámaras tienen "libre iniciativa" sobre el temario a tratar, a diferencia de las sesiones extraordinarias donde es el Poder Ejecutivo el que determina lo que se discute.

De todos modos, se sabe que todo lo que se trata en el Congreso a iniciativa de los bloques kirchneristas, que responden únicamente a Cristina Kirchner, como quedó demostrado la semana pasada cuando la mandataria ordenó imponer a los camporistas Julián Álvarez y Juan Forlón como miembros de la Auditoría General de la Nación, pese a la resistencia incluso del kirchnerismo.

Entre los proyectos que seguramente impulsará Cristina está el tratamiento de 15 pliegos para cubrir cargos en la Justicia, todos con funcionarios afines a la Casa Rosada. Los pliegos recién podrán tratarse en la Comisión de Acuerdos después de la sesión del 25 de noviembre, con lo que el kirchnerismo necesitaba sí o sí extender las sesiones.

La Cámpora también tiene interés en que el Senado dé sanción definitiva al “Régimen de Promoción de las Juventudes”, un proyecto que incluye la creación de cinco nuevos organismos y que le daría la posibilidad de asegurarse más designaciones de funcionarios.

En las últimas semanas, el kirchnerismo dio muestras de querer seguir creando organismos e impulsó la creación de dos "institutos de presupuestos", uno en Diputados y otro en el Senado. Se trata de dos oficinas que los K buscarán copar para controlar los gastos del próximo presidente. El kirchnerismo también tiene en carpeta la sanción de la Ley de Habitat.

También están pendientes los pliegos de los dos nuevos candidatos que envió Cristina para la Corte Suprema, aunque en este caso no hay ninguna posibilidad de que avancen por cuestiones de plazos, pero sobre todo políticas.

De todos modos, no será sorpresa si la Presidenta sorprende en las próximas semanas con algún nuevo proyecto.