Luego de que los abogados que representan a la Argentina en Nueva York le prometieran ayer al juez Thomas Griesa que la semana próxima funcionarios nacionales irían con una propuesta para resolver el litigio con los buitres, esta mañana Jorge Capitanich descartó cualquier tipo de viaje a Estados Unidos.

"No hay misión ni comitiva preparada para un eventual viaje a Estados Unidos", afirmó el jefe de Gabinete en una conferencia de prensa donde criticó en durísimos términos a la justicia norteamericana por intentar "fulminar" la reestructuración de la deuda.

"El levantamiento del stay (la medida cautelar) establece un problema respecto a la Argentina, porque las órdenes pari passu le impiden pagar los próximos cupones a menos que pague lo reclamado por los fondos", agregó en línea con el comunicado emitido anoche por el Gobierno.

Ayer, uno de los abogados de la Argentina confirmó tras la audiencia con Griesa que los funcionarios estaban dispuestos a negociar con los holdouts. "Me han dicho que el plan es estar acá la semana próxima para negociar con los 'holdouts' para resolver esta situación", señaló Carmine Boccuzzi.

LPO reveló en exclusiva que casi al mismo tiempo que sucedía la audiencia en Wall Street trascendió que el Gobierno argentino podría ofrecer al fondo NML de Paul Singer un pago en efectivo de 200 o 300 millones de dólares y financiar el resto de la deuda con bonos

Sin embargo, por la noche el Ministerio de Economía pulverizó esta opción con un comunicado en el que anunció que no pagará el próximo vencimiento de deuda debido a que la justicia de EEUU levantó la cláusula stay y los buitres podrían embargar ese pago. 

De esa forma, la cartera de Axel Kicillof anunció que el país volverá a caer en default el próximo 30 de junio, cuando debería realizar el pago a los bonistas que entraron al canje. 

El anuncio de que no hay ninguna misión prevista para viajar a Nueva York a negociar con los holdouts y Griesa no hace más que dejar de lado la única alternativa que tiene el Gobierno para evitar la cesación de pagos.

Leña al fuego

Además de descartar la posibilidad de negociar con los holdouts -lo que en los hechos no hace más que confirmar que Argentina no cumplirá el fallo-, Capitanich criticó duramente a Griesa, a quien acusó de darle a los fondos buitre "una tasa de retorno de 1.608 por ciento" y de levantar la cláusula stay para "fulminar el proceso de restructuracion más exitoso de la historia".

El jefe de Gabinete insistió en que el juez le dio a Singer una "tasa exponencial de ganancia sin ningún tipo de razón o fundamento, obviando consideraciones al proceso de reestructuración voluntaria" y lo acusó de actuar con imparcialidad. "Objetivamente debe impartir justicia, que significa equidad de trato entre las partes. Cuando promueve tamaña parcialidad, no es equitativo, promueve profundamente el desequilibrio", fustigó.

"Argentina respeta y honra sus compromisos con aquellos acreedores que adhirieron al canje voluntario de deuda (pero) la interpretación de Griesa y sus voceros pretende desnaturalizar esta cuestión", advirtió el funcionario. "Lo que debería haber evaluado el juez es que la Argentina, desde la ley cerrojo, generó las condiciones para el pago regular de todas sus obligaciones", agregó.

Después de echar leña al fuego con sus palos a Griesa, Capitanich se hizo tiempo para pegarle a la justicia argentina. El jefe de Gabinete se quejó de que "el sistema judicial argentino no se ha expedido" frente al fallo.

"Observo, no sin una reflexión, que el sistema judicial argentino no se ha expedido frente a este tema. No hemos observado ni que la Corte Suprema de Justicia de la Nación establezca una opinión al respecto, ni tampoco jueces de instancias inferiores", protestó Capitanich.  

"En la República Argentina proliferan de una manera sistemática y continua medidas cautelares de distinto tipo pero una cuestión de esta naturaleza -que afecta el desenvolvimiento autónomo del país- no ha contado con la participación de ningún miembro de este poder del Estado", continuó.