El dólar paralelo volvió a registrar un nuevo récord durante la jornada, al superar la barrera de los 11 pesos. En las cuevas de la city porteña el “blue” se consiguió a unos $11,25, y escalaba así 30 centavos respecto de ayer, mientras las reservas del Banco Central cayeron otros U$S161 millones y perforaron el nivel de los U$S30.000 millones.

La disparada del billete verde en el mercado negro sucede luego de la feroz intervención que viene haciendo la Anses con ventas masivas de bonos y títulos públicos para intentar bajar la cotización. Pero hasta ahora no sólo no lo consiguió, sino que, por el contrario, la sed de divisas se agudizó.

Los negocios en Bonar X y Boden 2015, los títulos preferidos por los inversores para dolarizar carteras, alcanzaron ayer los 400 millones de pesos, casi cuatro veces la cifra comerciada en acciones en la Bolsa de Comercio porteña.

Mientras tanto, el dólar oficial se ofrecía las pizarras de los bancos y casas de cambio a $6,75.

De esta manera, la brecha entre las dos cotizaciones se ubica por arriba del 60%, complicando el objetivo del ministro de Economía Axel Kicillof y del titular del Banco Central, Juan Carlos Fábrega, de ir acercando los dos valores.

Es que a pesar de que el gobierno está devaluando a un ritmo sumamente acelerado-desde que asumieron como funcionarios el peso se depreció 10%-, el precio del blue sigue escapándose y así la distancia entre el oficial y el paralelo no logra achicarse.

A las 8 de la noche, el BCRA informó que las reservas cerraron en U$S29.858 millones. En las últimas cuatro ruedas, la entidad monetaria ya perdió U$S291 millones.