Gabriela Michetti debió aceptar parcialmente la presión del peronismo y eliminar a la comisión del presupuesto del debate de la ley del aborto.

Como anticipo LPO, Federico Pinedo lo había propuesto en la reunión de labor parlamentaria de este martes junto a fijar el 8 de agosto como fecha para tratar el proyecto en el recinto, donde aún tiene final abierto. 

Pero Gabriela Michetti desconoció esa negociación y esta mañana difundió su rechazo a modificar el giro de la ley a cuatro comisiones: Salud, Presupuesto, Asuntos Constitucionales y Justicia y Asuntos Penales. 

Pinedo le había propuesto a Pichetto reducir a tres las comisiones donde se tratará el aborto y llevarlo al recinto el 8 de agosto. Michetti se resistió, pero cuando hubo consenso cedió. 

Fue en respuesta a una impugnación de Miguel Pichetto y el kirchenrista Marcelo Fuentes, que denunciaron un intento de dilatar el debate y tuvieron eco en legisladores de Cambiemos.  

"Resulta de escasa profundidad sostener que por el solo hecho de que el texto articulado no hace referencia a la creación de una partida presupuestaria específica, eso significa que no tendrá erogación alguna por parte de los Estados provinciales. Más aún, dicha omisión obliga con mayor énfasis a los senadores a avocarse a ese análisis", escribió la vicepresidenta.    

Y ratificó sus giros en un decreto de dos artículos, que sólo unas horas vio como desestimaban en el recinto con respaldo de todos los bloques, a excepción del Frente Cívico de Santiago de Estero que insistió en mantener Presupuesto.

Pichetto, que avala la ley, aceptó que se sostenga el giro a Asuntos Constitucionales, una provocación porque abre el debate sobre si la interrupción del embarazo viola la Carta Magna, como insisten sus detractores. 

Lo hizo tras una tensa reunión de bloque, donde se trenzó con el camtarqueño Dalmacio Mera y el formoseño José Mayans, que insistían en sostener Presupuesto, pero nadie lo acompañó. Tampoco fue fácil la discusión en Cambiemos, pero a nadie le convenía resolver el dilema en una votación de final incierto. 

El debate empezaría la semana que viene y sería coordinado por la Comisión de Salud, presidido por el radical Mario Fiad, que acaba de anunciar su voto en contra del aborto legal. 

Trabajarán en plenario, emitirán dictamen el miércoles 1 y siete días más tarde llegara el recinto y con final abierto. 

Afuera del Congreso volvieron a sentirse las manifestaciones: temprano hubo un "escarpinazo" por las dos vidas, con banderas celestes, rezos en ronda y un bebé gigante contra la fachada del Senado.

Por la tarde, la campaña a favor del aborto hizo su acto en la plaza, con escenario y artistas. Convivieron en paz.