En un capítulo más de la crisis con su jefe Miguel Pichetto, el peronismo frenó en el Senado una ley para ampliar los créditos de la tarjeta Argentina que utilizan los jubilados a beneficiarios de Asignación por Hijo y Pensiones no contributivas.

Para evitar los ya habituales retoques que le hace el Congreso a los proyectos de Mauricio Macri, el jefe de la Anses Emilio Basavilbaso trazó una estrategia que no terminó bien: envió el proyecto el 29 de junio y se trató el miércoles temprano en comisión para aprobarlo en la sesión unas horas después.

Pero lo que se suponía sería un amplio acuerdo para ampliar un beneficio, terminó en un duro fracaso y desnudó una interna del bloque PJ-FPV.

Pichetto, justamente, se sorprendió cuando Federico Pinedo pidió tratar el proyecto después de aprobar los acuerdos judiciales, pese a que en el temario estaba como último tema. 

"¿Este es el de la tarjeta Argenta? Es un beneficio de nuestro Gobierno", lo promocionó, mientras sus pares miraban sorprendidos porque se había alterado el orden y no conocían bien el texto que su jefe parecía tener cerrado.

Lo habían presentado cinco funcionarios de Anses temprano, en una reunión de comisión que no tuvo dictamen (nadie lo vio con las firmas) y en tal caso era indistinto, porque no habían pasado los 7 días necesarios para hacerlo valer en el recinto.

Por lo tanto hacían falta dos tercios y los discursos de la santafesina María de los Ángeles Sacnun, José Alperovich y el formoseño José Mayans.

"Hay que ayudar, pero ayudar bien. Un 25% anual es una locura", dijo el ex gobernador de Tucumán. "A estos usureros no le voy a dar una cartera de 10 millones de jubilados es una locura", completó el formoseño, que es vicejefe de bloque.

"Ese es el tema", respondió Pinedo, desde la presidencia de la sesión, donde en teoría no puede hablar. Ocurre que los senadores no sabían bien cuáles eran los créditos y a qué costo se ampliarían.

Muchos contaban casos de mutuales provinciales que terminaban captando haberes completos de empleados públicos por tasas impagables.

Mayans desautorizó a Pichetto, que no tardó en aparecer. "Estamos en un año electoral y tenemos que definir qué hacer. Le hablo a mi bloque y en voz alta", desafió.

Le salió mal, porque los senadores se levantaban de sus bancas para recordarle que jamás les había mencionado este proyecto en la reunión de bloque de este martes.

"Bueno que vuelva a comisión", se rindió el rionegrino. "¡Hablan de defender a los sectores populares y no defienden esto!", gritó la tucumana radical Silvia Elías de Pérez.

El pampeano Daniel Lovera, leal al gobernador Carlos Verna, recordó que el proyecto no fue girado a la Comisión de Previsión Social y Trabajo, que él preside y, se supone, es la más vinculada al tema. Ahora, el debate vuelve a empezar.