Germán Garavano después de dar muchas vueltas, innumerables reuniones, viajes y filtraciones varias a la prensa, terminó reconociendo lo obvio: El gobierno de Mauricio Macri no tiene manera de administrar la información en posesión de Estados Unidos y Brasil sobre el caso Odebrecht, que eventualmente si algo viene al país, será a través de los pertinentes canales judiciales. Es decir, nada cambió.

LPO advirtió apenas el gobierno de Macri lanzó la frenética sucesión de reuniones vía Garavano y la titular de la Oficina Anticorrupción, Laura Alonso, que era un camino infructuoso o directamente ilegal, ya que nuestro sistema no permite al Poder Ejecutivo administrar perdones o condenas en causas penales.

Este viernes, Garavano intentó disimular el fracaso, "informando" a la prensa lo que ya se sabía: serán los jueces del fuero federal los que deberán solicitar colaboración a sus pares de los Estados Unidos la información que poseen del caso Odebrecht, algo que obviamente ya estaban haciendo sin necesidad de que el ministro de los diga.

Garavano intentó brindar un balance de su reciente visita a Estados Unidos, durante una charla con los periodistas en el Palacio san martín, en el marco d eun encuentro de ministros de Justicia y Seguridad de la región.

"Tuvimos reuniones muy satisfactorias de apoyo total, no solo del Gobierno, sino del Departamento de Justicia de los Estados Unidos", aseguró al resumir su periplo, que había generado fuertes expectativas acerca de la posibilidad de conseguir datos sobre los receptores de los sobornos para supuestamente favorecer a Odebrecht con obras públicas.

Garavano rehusó dar nombres de esos posibles "coimeros" (incluso de comentar si el Gobierno los tiene) y se amparó en que "esto es una investigación judicial", por lo que mandó a los periodistas a preguntarles a los jueces y fiscales.

También explicó que el embajador Eugenio Curia, jefe de Relaciones Internacionales de la Cancillería, "estuvo transmitiendo a los jueces que tienen este caso cuales serían las formas en que los fiscales de Estados Unidos ofrecieron colaborar con Argentina".

Sostuvo que los fiscales estadounidenses manifestaron "una amplia predisposición con los jueces, fiscales y la Oficina Anticorrupción de Argentina en este caso puntualmente".

Garavano rehusó precisar cómo sería esa colaboración, ya que "es algo que tienen que definir los jueces y fiscales".

Y precisó que desde el Gobierno "no ingresamos en el contenido del caso formalmente sino como autoridad central del convenio bilateral que existe entre Argentina y Estados Unidos".

"Nos encargamos de la logística y de todo lo que tiene que ver para que esta comunicación pueda ser efectiva", añadió, y puntualizó que "el embajador Curia les transmitió a los jueces que está a disposición de ellos la información y la colaboración de los fiscales norteamericanos".

Consultado sobre si Estados Unidos ya había enviado información, el ministro aseguró que "no se trata de mandar o no mandar" datos sino de, comentó, "generar mecanismos de cooperación e investigación conjunta".

"En el día de hoy se les está enviando una nota a los jueces en relación a cómo ellos deben en definitiva, con sus pares de los Estados Unidos, definir los mecanismos de cooperación judicial", concluyó.