El gobierno de Daniel Scioli define por estas horas modificaciones en la estructura del ministerio de Educación bonaerense que reforzarán el poder la titular de esa cartera Nora de Lucia.

El esquema de cambios va en línea con el proyecto de ley enviado a la Legislatura por el Ejecutivo que planteaba volver a la estructura que fija el artículo 68 de la Ley de Educación de la Provincia, modificada por Silvina Gvirtz en 2011 cuando asumió el control de esa cartera.

En lo llano, las nuevas modificaciones significan una reducción de la estructura ministerial que permita mayor funcionalidad al ministerio. La iniciativa ya fue aprobada por el Senado y se aguarda la aprobación de Diputados en los próximos días.

En líneas generales, se trata de la eliminación de dos de las cuatro subsecretarías. Las subsecretarías de Gestión Educativa y Recursos Humanos serán absorbidas por las de Educación y Administrativa que quedarán potenciadas. La estrategia, explican fuentes del gobierno provincial, será lograr una estructura “más ágil y menos burocrática, potenciando dos áreas claves”.

Pero este achicamiento, supone la salida y el ingreso de nuevos funcionarios. Los nombres quedaron definidos tras una reunión entre el propio Gobernador y De Lucia.

El actual subsecretario Administrativo, Walter Carbone, dejará el ministerio y llegará un hombre cercano a De Lucia. Se trata de Gustavo Sendra, actual subsecretario de Coordinación Económica, virtual viceministro de Economía y quien maneja la negociación con los gremios.

Pero además, como parte de una transición acordada hace varios meses, el actual subsecretario de Educación, Carlos Gianella, dejará su cargo para que ese organismo sea absorbido por Gestión Educativa, que quedaría en manos de Néstor Ribet.

Durante la semana pasada circularon fuertes rumores de una posible salida de De Lucia. Las versiones aparecieron luego que cinco trabajadores de esa cartera fueran detenidos por la policía bonaerense acusados de "coacción agravada", debido a las protestas gremiales llevadas adelante por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) en la sede educativa a fines de 2012.

En ese marco, la ministra mantuvo una reunión con el Gobernador donde puso a disposición su renuncia. Rechazada por el ex motonauta, De Lucia logró negociar un hombre de su entorno para la ahora poderosa subsecretaría Administrativa.