Cargos para gremialistas cercanos al Frente Gremial y la palabra de no realizar descuentos por los paros realizados fueron parte de la negociación entre el gobierno de Daniel Scioli y los docentes para destrabar el conflicto.

Casi en simultáneo con la noticia de que el Frente Gremial docente decidía acatar la conciliación obligatoria y suspendía las medidas de fuerza anunciadas, asumía como directora de Educación Superior -un área que se ocupa de supervisar el trabajo de los institutos terciarios- la profesora Andrea Gatti, una docente cercana a Suteba (el sindicato que controla Roberto Baradel) y que hasta ahora se desempeñaba como subdirectora de Formación Docente.

Según trascendió, ese cargo solo es una parte de acuerdo alcanzado con el gobierno provincial, un pacto que incluiría a futuro la posibilidad de colocar “tropa propia” en cargos relevantes de la cartera educativa a cambio de bajar el tono, canalizar los reclamos de manera “pacífica” o directamente resignar algunos reclamos gremiales.

Según pudo saber LPO, como parte de ese acuerdo el gobierno provincial puso freno a los descuentos que iban a realizar a los docentes por los ocho paros realizados en lo que va del año. Sólo se aplicaron descuentos por los primeros dos días de clase.

Un hombre de Aguer en el ministerio

Pero a este cambio en el gabinete de Nora de Lucia se suma además la salida de la subsecretaria de Gestión Educativa, Nora Estrada. La salida de la ex senadora provincial fue una fuerte discusión con la titular de la cartera educativa a raíz del último pago a docentes.

Es que unos 18 mil docentes tuvieron inconvenientes a la hora de cobrar el sueldo correspondiente al mes de marzo. En la Provincia atribuyeron a un problema como consecuencia de las inundaciones del 2 de abril. Sin embargo, desde Udocba aseguraban que la mayor parte de ese número de maestros no había recibido el 19 de abril su salario.

Fue en ese marco que Estrada habría mantenido fuertes diferencias con De Lucia y allí tomó la decisión de dejar su cargo. Orgánica al peronismo Estrada confirmó días atrás su alejamiento de la gestión educativa.

“Dejo el cargo no la militancia política y mi compromiso con la educación. Los caminos se cruzaran. Agradezco al Gobernador su confianza”, escribió en su cuenta de Facebook.

En su lugar, De Lucia designó a Néstor Ribet, quien hasta ahora -y desde la gestión de Mario Oporto- se desempeñaba como director de Educación de Gestión Privada. Según pudo saber LPO, Ribet es un hombre de largo recorrido en la burocracia gubernamental y, sobre todas las cosas, a partir de sus responsabilidades en los últimos años, de excelente relación con la Iglesia y especialmente con el Arzobispo de La Plata, Héctor Aguer.

Desde Educación explican que la subsecretaría de Gestión Educativa, el nuevo cargo de Ribet, implica el control de la nutrida plantilla de inspectores distritales y regionales que tiene el ministerio, tanto para las escuelas públicas como para las de gestión privada.

Es decir que desde esa oficina se maneja a los funcionarios educativos que tienen el contacto cotidiano y decisivo con la realidad territorial de las escuelas. Los inspectores pueden contener los conflictos en el sistema o, por el contrario, darles mayor envergadura. Son el engranaje fundamental del sistema educativo bonaerense. “Sin los inspectores, o con los inspectores en contra, no se puede hacer nada, ninguna política puede aplicarse y perdurar”, aseguran fuentes de la cartera educativa.

Ribet fue profesor en la Universidad Católica Argentina (UCA. También fue docente en la Facultad de Filosofía y Letras de la UCA, desde 1977 a 1984. “Se va una dirigente política y llega un hombre de la Iglesia”, dicen en Educación.

En tanto, el portal Letra P da cuenta de otro movimiento en la estructura del ministerio. La dirigente del Movimiento Evita, Ludmila Kostiuk, fue designada como directora de Calidad Educativa. Kostiuk es pareja de Facundo Pérsico, hijo de Emilio Pérsico.