Las mismas dificultades que sufrió y sufre la administración de Mauricio Macri a quien el gobierno nacional nunca otorgó los avales para que consiga créditos internacionales para obras claves, ahora sufren los socialistas que gobiernan Santa Fe.

Así como Macri que tenía a disposición líneas de organismos multilaterales como el Banco Mundial y el BID para obras claves como la extensión de la red de Subtes o el entubamiento del arroyo Vega, nunca consiguió que la Casa Rosada le firme los necesarios avales; ahora el socialista Antonio Bonfatti ve peligrar créditos que consiguió en Kuwait para hacer obras que lleven agua potable y cloacas a las zonas más postergadas de su provincia.

Esta situación que Bonfatti venía tratando de manejar con la discresión habitual de los socialisras, terminó estallando días atrás cuando se cruzaron la intendenta socialista de Rosario, Mónica Fein y el jefe de los diputados kirchneristas Agúnstín Rossi, quien rechazó que el gobierno nacional esté trabando avales para obras claves en esa ciudad.

La crisis estalló porque Bonfatti no logra que la Nación le firme los avales necesarios para que se destrtabe el acuerdo que firmó con el Fondo Kuwaití para el Desarrollo Económico Árabe, que prestará fondos a la provincia para la construcción del acueducto Noreste 2 – Reconquista. En este tipo de préstamos los estados subnacionales –como la Capital o Santa FE- necesitan que la Nación firme los avales, sin ese prerequisito los organismos no pueden liberar los fondos.

Créditos y reformas

“Desde la cartera de Hacienda de Santa Fe se avanzó en la negociación de las condiciones del crédito con el que se financiará una obra que abastecerá de agua potable a 230 mil habitantes del centro-norte de la provincia. El trámite requiere ahora del cumplimiento de Nación de todos los procedimientos jurídicos para respaldar la gestión encarada por el gobernador Bonfatti en su viaje a territorio árabe en mayo”, explicó a LPO Gonzalo Saglione, secretario de Finanzas del Ministerio de Economía de Santa Fe.

Si bien el funcionario fue cauto y prefirió no referirse a posibles trabas de la Nación, reconoció que “en la gestión política no se está exento de riesgo”. Saglione explicó que para contar con los fondos debe existir la voluntad política del Estado Nacional de respaldar el trámite, “más allá del cumplimiento de todas la metas administrativas y jurídicas que la solicitud exige de cada una de las partes”.

El temor ante la posibilidad de que Nación demore la firma de las garantías que venía creciendo en sordina, estalló la semana pasada cuando la intendenta socialista de Rosario, Mónica Fein, denunció la caída de un plan de cloacas para 39 mil familias por la negativa de gobierno de Cristina Kirchner de rubricar un crédito gestionado por la comuna ante el Banco Mundial. Las declaraciones de Fein generaron la rápida respuesta del diputado kirchnerista Agustín Rossi quien dijo que hay tiempo hasta mediados de 2013 para gestionar el desembolso.

Si bien Rossi no mintió del todo, en el socialismo crece el temor de que finalmente los avales nunca lleguen o lo que es peor, que el Gobierno utilice esa facultad para presionar políticamente al FAP, a quien en el kirchnerismo siguen viendo como el socio ideal para conseguir una reforma constitucional que habilite a Cristina a peler por un tercer mandato.

“Aún restando el convenio de garantía (que debe firmar el organismo con el Estado Nacional), podemos continuar con el proceso de inversiones; esto es, la redacción de pliegos y el llamado a licitación, es decir, avanzar hasta la firma definitiva del contrato de préstamo”, reconoció el ministro de Economía provincial Angel Sciara. Pero en su equipo reconocen que la fecha límite para conseguir el préstamo no es mediados del año que viene como dijo Rossi sino marzo de 2013.

Las obras

EL plan de crédito propone una tasa de interés del 3 por ciento, con 4 años de gracia y a devolver en 20 años. El Acueducto Reconquista es uno de los 12 grandes sistemas de abastecimiento de agua potable planificado por el gobierno de la provincia de Santa Fe para dotar a la totalidad de las poblaciones que presentan deficiencias de suministro de agua o bien carecen del mismo. El área de influencia cubre 12.200 kilómetros cuadrados (9% del territorio provincial), con una población de aproximadamente 187.000 habitantes (se proyectan 275.000 para el año 2041).

Las negociaciones con los representantes kuwaitíes se dan justo cuando en la Legislatura santafesina se evalúa un proyecto de Ley girado desde el Ejecutivo para habilitar endeudamiento por 500 millones de dólares que tiene como objetivo concretar grandes proyectos de obra pública que exceden los fondos presupuestarios que maneja la provincia y que es criticado por algunos referentes de la oposición en Diputados por no explicitar el destino final de los fondos.