El ex gobernador de Mendoza, Celso Jaque, dejó su cargo en diciembre de 2011 envuelto en una polémica que terminó, desde el plano legal, con la suspensión del fiscal de Estado, Joaquín de Rosas. Pero los costos económicos para la provincia recién están saliendo a la luz este año. Es que la semana pasada, el Instituto de Juegos y Casinos de la provincia anunció los números de la recaudación pero también confirmó lo que se sabía de antemano: que el Estado cobra mucho menos después de la renegociación del contrato con la empresa Mendoza Central Entretenimientos, concesionaria de los tragamonedas del Casino Central.
El año pasado, el gobierno de Jaque propuso renegociar el contrato y le duplicó el canon a la empresa que pasó del 23,23 al 47 por ciento con la contraprestación de de aumentar la cantidad de máquinas tragamonedas y otras reformas. Ese proceso fue avalado por el Fiscal de Estado Joaquín De Rosas, que fue denunciado ante el Jury que lo suspendió.
En 2003, los tragamonedas del Casino Central fueron concesionados a la empresa española Cirsa a través de Casino Buenos Aires. Luego los españoles se aliaron con Cristóbal López y su Casino Club. De todos modos, fuentes del ambiente del juego aseguran que detrás de los tragamonedas del casino de Mendoza también está el grupo Vila-Manzano aunque no figure en los papeles.
Lo cierto es que, de acuerdo al sitio Mendoza Online, el Instituto de Juegos y Casinos anunció la semana pasada que había más recaudación pero por el nuevo contrato Mendoza Central Entretenimientos subió casi un 90 por ciento sus ganancias en los últimos meses, mientras que el Estado sólo aumentó un 1% los ingresos, sin tener en cuenta además la inflación. El Instituto corre por su cuenta, además, con todos los costos de mantenimiento, desde el personal, hasta los servicios. Pero la ecuación podría ser peor, pues esas cifras son provisorias y sin aplicar aún el canon total que el Gobierno acordó pagarle a la empresa: hoy pagan 40,09% de las ganancias y el acuerdo final es que se lleven el 47%.
Según los trabajadores del del Casino, entre enero y agosto del 2011, con 369 máquinas tragamonedas el Casino “ganó” 39,909.681 pesos. De esa cantidad, el Estado se quedó con 29.441.372 pesos y Mendoza Central Entretenimientos con 10.468.309 pesos. En el mismo período de este año, con el nuevo contrato en vigencia parcialmente y 550 máquinas, las ganancias generales de los tragamonedas fueron 49.003.607.
Hay más “ganancias”, pero la empresa se llevó 19.244.632 pesos, aumentando en un 84% sus ganancias respecto al año anterior. En cambio, el Estado se llevó 29.758.975 pesos, apenas el 1% más que el año anterior. En la proyección que hacen los trabajadores, si se aplicara el 47% del canon, directamente se pasaría a perder plata. De hecho las condiciones ya están dadas para que se aplique el canon total.
De todas maneras, la actual titular del Instituto Provincial de Juegos y Casinos, Nidia Martini, aseguró que la renegociación fue “legal” aunque recordó que cuando asumió el gobernador Francisco Pérez “ya estaba todo firmado e incluso se hicieron asambleas en las que el personal del casino estaba presente”.