El Gobierno desoyó hoy los reclamos de Estados Unidos, la Unión Europea y una docena de naciones contra su política de importaciones presentados ante la Organización Mundial de Comercio (OMC), pero destacó que no formaron parte los países del Bric.
Este último grupo lo compone un nuevo grupo de naciones industrializadas como Brasil, Rusia, India y China.
"La Cancillería argentina reitera que el gobierno seguirá ejerciendo la decisión soberana de sus políticas comerciales que han impulsado el mayor crecimiento económico de nuestra historia y cumpliendo con las normativas de la OMC pero rechazando cualquier tipo de injerencia externa", indicó un comunicado de la cartera conducida por Héctor Timerman.
El gobierno estimó que el documento fue firmado por "algunos de los 157 miembros" de la organización, y que mayoritariamente pertenecen "al mundo desarrollado".
"Es de destacar que importantes socios comerciales de la Argentina, como los países del Mercosur, la gran mayoría de los países latinoamericanos, China, Rusia e India no suscribieron esta declaración", destaca la Cancillería.
"Llama la atención que la iniciativa haya sido planteada por países que han aumentado sus exportaciones a la Argentina en un 25 por ciento superando su nivel de exportaciones promedio al resto del mundo", agregan.
Para la Cancillería ese proceso se dio "en un año en el cual la Argentina fue el país que más aumentó sus importaciones entre los miembros del G20, contribuyendo de esta forma a la recuperación económica de los países en crisis económica y financiera".
En relación a las técnicas diplomáticas, el texto oficial advierte que ninguno de los firmantes del documento presentó de manera individual hasta el momento un "caso" en el cual Argentina haya incumplido las reglas de la OMC.
El término "caso" en la jerga de la diplomacia comercial hace referencia a la elevación formal por un socio ante organismo de un planteo contra otro socio.
La respuesta argentina le resta validez al documento crítico de Estados Unidos, la UE y la docena de países acompañantes, al advertir que se basa en textos de la prensa.
"La República Argentina ve con alarma la insistencia de los países que siguen levantando barreras comerciales artificiales para dificultar el ingreso de productos agroindustriales de los países en desarrollo", dice el documento.
La declaración argentina acusa a esos países de ejercer "presiones políticas para obligar a estos países a recibir la producción de bienes que sus mercados domésticos no pueden absorber por la situación económica que atraviesan desde el 2008 y que son las verdaderas trabas para la construcción de un sistema económico multilateral más equilibrado".
Para ex funcionarios el Gobierno es culpable
Ex funcionarios argentinos del área comercial, legisladores y economistas coincidieron hoy en calificar como una "advertencia" a la queja formulada hoy ante la OMC por unos 40 países contra los controles de importación de la Argentina.
El ex ministro de Economía, Roberto Lavagna, consideró que el reclamo al que fue sometida la Argentina se debe a "la torpeza" de los funcionarios nacionales, mientras que el jefe de la bancada del PRO de diputados, Federico Pinedo, expresó el temor a que expulsen al país del G20.
En cambio, el ex subsecretario de Integración Regional de la Cancillería, Eduardo Sigal, defendió la posición argentina, mientras que el jefe de economistas de la consulta Abeceb.com, Mariano Lamothe, consideró que se trata de una "presión diplomática".
Lavagna consideró que la queja presentada por 40 países contra el mecanismo de control de importaciones se debe "a la torpeza de los funcionarios" del área.
El ex ministro sostuvo que "hay muy pocos antecedentes de que un número tan grande de países haya hecho una declaración de este tipo".
"Esta es una advertencia de que los países pueden llamar a consulta y si no da resultado tienen autorización para retaliar", afirmó el ex ministro de Economía.
El jefe del bloque del PRO en Diputados, Federico Pinedo, expresó su preocupación por considerar que "pueden sacar al país del único foro importante que le queda que es el G20, donde puede interactuar con el mundo".
"Es muy grave para el interés nacional la queja de 12 países, Unión Europea y EEUU en la OMC contra Argentina por las trabas de Moreno", indicó Pinedo.
Por su parte, Sigal rechazó los reclamos de Estados Unidos y la Unión Europea por el control de importaciones argentino al afirmar que "no es muy distinto del que aplican esos países cuando defienden su competitividad".
Sigal, quien trabajó en la Cancillería hasta el año pasado, sostuvo que "la Argentina esta haciendo una aplicación de sus derechos en el marco de los acuerdos en la OMC" por lo cual consideró que "no debe haber inconvenientes".
No obstante, el ex funcionario, hoy dirigente del Frente Grande, consideró que la presentación realizada hoy por unos 40 países "puede ser que contenga un mensaje político".
Por su parte, Lamothe calificó de "normal" en el marco del sistema comercial internacional al documento de la UE y Estados Unidos.
"Es un comunicado de conjunto, no es vinculante y no tiene efecto directo. No es para alarmarse y no va a impactar", dijo el economista de Abeceb.com.
Lamothe recordó que todos las naciones usan los mismos mecanismos que la Argentina para controlar las importaciones pero advirtió que el país es máximo proveedor mundial en algunos productos que contrapesa a los reclamos.
"La Unión Europea se puede quejar, pero llegado el caso no puede dejar de comprar biodiesel y el mayor proveedor es Argentina", dijo a modo de ejemplo Lamothe.
“Estamos más abiertos que en los 90”
La ministra de Industria, Débora Giorgi, rechazó el planteo realizado ante la Organización Mundial del Comercio (OMC) por un grupo de naciones y afirmó que hoy la Argentina tiene una economía dos veces más abierta que en los \'90".
Giorgi expresó que "recibimos esta noticia con profunda sorpresa y malestar. Rechazamos esta declaración por considerar que no está sustentada en datos objetivos" y cuestionó las "supuestas medidas restrictivas al comercio internacional".
La ministra defendió la potestad que tiene Argentina de llevar adelante políticas de comercio administrado "como lo hace la mayoría de los países del mundo, incluso los que hicieron este planteo".
Giorgi afirmó que "son muchos los exportadores argentinos que ven impedido el ingreso de sus productos a muchas economías de los países centrales: ajo, cítricos, leche en polvo, carne son apenas ejemplos de productos argentinos que no pueden entrar por esta política comercial que aplican otras naciones. En 2011 las importaciones argentinas crecieron 30,8% respecto de 2010 y entre 2003 y 2011 el crecimiento de las compras al exterior fue del 434%”.
La ministra subrayó que "todas las medidas de administración de comercio argentinas (como licencias automáticas y no automáticas) están contempladas por la OMC y las utilizan otros 100 países en el mundo. En el caso de las licencias aplicadas en nuestro país, comprenden solo el 6% del universo de las posiciones arancelarias".