Francisco de Narváez había insinuado días atrás la posibilidad de llevar a un radical como candidato a vicegobernador, pero con el paso de las horas la opción fue perdiendo fuerza ¿Qué sucedió en el camino? No fueron tanto las presiones de los sectores peronistas que impulsaban a Mónica López, sino las propias complicaciones de los radicales y en particular una serie de frondosos escándalos que golpearon al senador Juan Carlos Simón, uno de los candidatos que hasta ese momento venía con mayores chánces.

El primero en bajarse fue el intendente de San isidro, Gustavo Posse, que prefirió reelegir en su distrito, antes que lanzarse a la aventura de una vicegobernación con pronóstico reservado. Lo mismo sucedió con Mario Espada de Tres Lomas y Daniel Molina de Necochea. Todos optaron por competir en sus municipios por otro mandato. Esa deserción dejó bien posicionado al senador Simón, hasta que en el bunker de Las Cañitas empezaron a recibir comentarios alarmantes sobre la trayectoria d eeste ex intendente de Bolívar.

Se supo entonces que son tan grandes los escándalos que involucran a Simón, que el Concejo Deliberante de Bolívar estudia un pedido para conformar una comisión investigadora en su contra, impulsada nada menos que por dirigentes del propio De Narváez.

En efecto, luego que por denuncias de particulares estos escándalos tomaran estado público, el ex candidato a concejal Claudio Carnevale y el ex candidato a intendente, el duhaldista Raúl Mosca, se presentaron en el Concejo Deliberante de Bolivar solicitando la creación de una comisión investigadora, que estuvo a punto de aprobarse en la sesión del miércoles pasado, pero no avanzó gracia sa que el radicalismo logró sumar los votos d elos concejales de la Coalición Cívica.

Las denuncias

La más grave de las denuncias que enfrenta Simón se vincula con un mega negocio inmobiliario, apelando a la vieja táctica de cambiar la zonificación de las tierras luego de comprarlas a precios de saldo. Aparecen en este caso allegados y familiares del senador, así como su sucesor, el intendente radical José Gabriel Erreca.

El más evidente es Matías Simón, que además de un pujante y exitoso empresario inmobiliario, es el hijo del ex intendente. El escándalo comienza en el 2007, cuando se inscribe un bien inmueble compuesto de 11 ½ hectáreas. Identificado como chacra 137, parcela 1s, ubicado en prolongación Barrio Colombo, a nombre de Juan Matías Simón y Malena Cordeu en partes iguales -50% y 50%-.

El primer dato llamativo, es que en el informe de dominio de dicho inmueble, la Malena Cordeu figura con el estado civil divorciada del intendente José Gabriel Erreca. El segundo dato llamativo, es que el 50% indiviso correspondiente a Juan Matías Simón fue inscripto con fecha 21-06-2007, pero el 50% indiviso de Malena Cordeau fue inscripto con fecha 21-11-2007.

Ahora bien, ¿por qué la parte de Malena se inscribe meses más tarde? Es obvio, que el negocio estaba concretado por Erreca, pero como el divorcio se encontraba en trámite, tuvieron que esperar a que se dicte la sentencia para recién iniciar los trámites de escrituración a nombre de su esposa. La sentencia de divorcio tiene fecha 12 de julio de 2007. Curiosamente, la parte indivisa de Juan Matías Simón fue escriturada por el intendente Erreca.

En el año 2009, siendo Erreca presidente del Concejo Deliberante, se sancionó la ordenanza Nº 2019-2009, aprobándose por mayoría la incorporación de la chacra 137, parcela 1s a la zona residencial extraurbana para construir un country, lo que provocó un incremento fabuloso del valor de las tierras que había comprado junto a Simón. Además, de manera inmediata el municipio llevó a la zona los servicios de cloacas y asfalto. Se calcula que el predió tuvo un incremento de valor del 1500%.

Para los concejales del peronismos, que votaron contra la ordenanza, era tan evidente que se trataba de un negociado de Erreca y Simón, que los supuestos compradores del predio, no acreditaban de manera razonable fondos para comprarlo. Al momento de la operación, Malena Cordeu no ejercía la profesión y no registraba ganancias ante la AFIP, lo mismo que Juan Matías Simón.

En Bolívar se afirma que hasta el divorcio del intendente Erreca sería simulado para poder realizar la operación, ya que continuaría conviviendo y trabajando con su mujer, como el mismo a expresado en más de un acto público. Práctica similar que haría el senador Simón, que según se comenta en Bolívar, suele inscribir propiedades a nombre de su hijo.

Los vínculos comerciales entre Erreca y Simón son tan obvios, que se expenden más allá de la citada operación del Country. En Julio del 2008 Malena Cordeu y Juan Matías Simón compraron en partes iguales una importante propiedad ubicada en Avenida San Martín de Bolívar, tasada en más de 300.000 dólares. En este caso la oposición denunció además, que se utilizaron máquinas viales de la Municipalidad para trabajar en el predio.