La intensa interna que vive el justicialismo de La Matanza se cobró la primera “víctima”. El secretario de Medio Ambiente y Desarrollo Sustentable local, Raúl Magario, renunció a su cargo aduciendo problemas de salud aunque, en el peronismo matancero nadie niega que su dimisión está íntimamente ligada a la pelea por el primer lugar en la lista de concejales de Fernando Espinoza: esa lucha que ahora enfrenta a Verónica Magario y a la esposa de Alberto Balestrini, María del Carmen Cardo.

“Lo que yo tengo es que hay un problema de agotamiento y es para preservar su salud. Queda una persona una persona de confianza –sería Daniel Iglesias- de tal suerte que no tendría muchos cambios el área”, señaló a LPO el titular del bloque del FpV en el Concejo Deliberante, Ricardo Rolleri.

Sin embargo, las versiones sobre la salida de Magario son dos. Una es que existen algunos problemas para poner en marcha el polémico Centro Ambiental de Recomposición Energética (C.A.R.E.) en González Catán aunque la más fuerte señala que Magario – ex encargado de las finanzas de Montoneros- decidió dar un paso al costado con el objetivo de enfriar la pelea por el número 1 en la lista y dejarle el campo abierto a Espinoza para que elija a su hija. El lugar no es encierra solamente una candidatura a concejal: quien resulte electo será quien deba reemplazar al intendente y en La Matanza las especulaciones sobre la salida de Espinoza después de octubre son moneda corriente.

Magario es uno de los pocos hombres de confianza de Espinoza y uno de los pocos que puede garantizarle fidelidad. Sin embargo, la candidatura de Magario hija no es bienvenida por los “balestrinistas” puros y ahí surge el nombre de María del Carmen Balestrini, en una forma de aglutinar a todos los espacios y frenar la embestida contra el Intendente.

“El primer concejal es una decisión del intendente, tenemos que dejar que él decida. Evidentemente es una determinación política muy difícil no quisiera estar en su persona. Yo no se si tiene el consentimiento de la señora pero buscamos la mayor cantidad de consensos”, le dijo a LPO una fuente del oficialismo.

Como sea, el nombre de María del Carmen Belestrini helaría, al menos hasta octubre, la feroz interna justicialista. De todos modos, no todos creen que la esposa del vicegobernador acepte la propuesta y muchos la ven con un pie en La Plata, en la lista de diputados provinciales.

“Fernando ni le preguntó y no creo que María del Carmen acepte sin el consentimiento de Balestrini. Además, ella está al cuidado de su esposo las 24 horas, no creo que tenga la fortaleza para hacerse cargo de la interna”, contó otro dirigente kirchnerista.