En el día después de la embestida del sector más duro del PJ bonaerense contra el apoderado del partido, Jorge Landau, primó el silencio entre los consejeros. Nadie salió a respaldar al ministro de Desarrollo Social bonaerense, Baldomero “Cacho” Álvarez, en su anuncio de pedirle la renuncia al responsable del partido.

Sin embargo, por debajo y en reserva algunos consejeros dieron pistas del malestar del malestar que varios consejeros tienen con el diputado. “Hace rato que hay problemas con Landau. Es que pareciera que es el apoderado de la Casa Rosada y no del PJ bonaerense”, dijo a La Política Online un consejero que pidió reservas.

Que sea Landau el que gestione por debajo la ingeniería electoral para que el diputado Martín Sabbatella pueda ir con una lista de adhesión como candidato a gobernador bonaerense es, al criterio varios peronistas, un límite que el apoderado no debió cruzar. “Que sea alguien de la Rosada, como Carlos Zannini, por ejemplo, vaya y pase. Pero no Landau”, agrega el consejero.

Nadia afirma que haya existido una reunión, pero a varios les consta que Landau habría asesorado al ex intendente de Morón.

Algunos incluso hablan que el malestar se extiende al propio Daniel Scioli. En esa línea, parece lógico que quien haya avanzado con la amenaza de un pedido de renuncia sobre el apoderado sea un ministro de extrema confianza del Gobernador.

“La verdad es que una cosa es aceptar una colectora de Sabbatella, pero otra muy diferente es hacerle el juego a costa del PJ”, dijo un importante diputado bonaerense.

En las declaraciones “Cacho” Álvarez hizo ayer, aseguraba que "en la próxima reunión del partido pediremos la renuncia de Landeau por su accionar inconsulto con el resto de los miembros del partido". Y aunque por el momento no hay fecha para una nueva reunión, algunos consejeros coinciden en que la próxima reunión no puede demorarse toda vez que el consejo del PJ debe resolver algunas cuestiones de cara a la primaria. En particular temas relacionados con las alianzas electorales. La última reunión se realizó el 18 de febrero en Sierra de los Padres.

La desconfianza de Landau toma mayor relevancia ante una negociación clave que quedará en manos del apoderado.

Los jefes comunales saben que el diputado deberá negociar con el resto de los partidos que integran el Frente para la Victoria de cara a la conformación del frente electoral.

Es que la modificación del artículo 14 de la ley electoral que impulsaron los intendentes del PJ anuló el sistema D’Hont y dejó librado a la carta orgánica de cada partido la disposición de candidatos de cara a la elección general. Pero en el caso de un frente, se aplicará el sistema que adopten los apoderados de todos los partidos que conforman ese frente y no los de un solo partido.

Por eso, Landau tendría la lapicera para sentarse con los apoderados de otros partidos chicos y definir cuál será el porcentaje que adoptará el frente. En ese punto, a los intendentes les preocupa que el apoderado del PJ bonaerense responda directamente a la Rosada y no a los jefes del Conurbano.