Con el objetivo de sancionar la regulación al sistema de prepagas y aprobar el proyecto endurecer los controles sobre lavado de dinero, el kirchnerismo de Diputados apelará el miércoles al mecanismo que utilizó la oposición todo el año pasado para debatir temas incómodos para el Gobierno: la convocatoria a una sesión especial.

"Vamos a hacer el esfuerzo de reunir quórum para sesionar sobre tablas. El lunes vamos a insistir y si es necesario el miércoles vamos a pedir una sesión especial para tratar el proyecto de medicina prepaga y el de lavado de dinero”, sostuvo la diputada María Teresa García, secretaria parlamentaria del bloque oficialista, que tiene sólo 86 diputados propios, cuando el quórum se consigue con 129.

Habitual encargada de sentar a los kirchneristas, García hizo el último esfuerzo para tener mayoría propia oficial en la sesión convocada para debatir el presupuesto el 17 de noviembre, tras escándalo por la denuncia de sobornos.

Consiguió sumar 118 voluntades, once menos que lo necesario para el quórum y, también, la cantidad de diputados que integran el interbloque de centroizquierda, en quienes confían para que al menos den quórum.
La apuesta oficialista podrá además vislumbrar los nuevos aliados del kirchenrismo, como los dos cordobeses que responden al gobernador de Córdoba Juan Schiaretti o la rionegrina Lorena Rossi.

Por distintos motivos, ambos proyectos inquietan al Gobierno y también tienen el acuerdo de la mayoría de la oposición. No se trataron el último miércoles porque el kirchernismo se negó a incluir en el temario proyectos que no quiere que se traten, como la regulación a la publicidad oficial. Con una sesión especial no correría ese riesgo, ya que sólo se debaten los expedientes que forjaron la convocatoria.

Sobre lavado de dinero hay tres proyectos: uno del oficialismo y dos de la oposición (uno de la centroizquierda y el otro del resto de las bancadas). Coinciden en aspectos centrales (la tipificación del delito de lavado, por ejemplo) pero el kirchnerismo no cede en aceptar un control del congreso de los funcionarios de la Unidad de Información Financiera (UIF).

Para que algún proyecto sea aprobado, la mayoría del cuerpo debería abstenerse de rechazarlo porque si se repite la votación que hubo en la comisión en el recinto, todos serían rechazados. El martes el ministro de Justicia Julio Alak visitó Diputados y advirtió que si el 20 de junio el Grupo de Acción Financiera Internacional (Gafi) sancionará a Argentina si no se sanciona ninguna ley.

Sobre prepagas hay acuerdo mayoritario de aprobarlo con mayoría simple con los cambios del Senado, ya que hasta ahora sólo se opuso expresamente el Pro y habría una resistencia de un sector del peronismo federal.