Siguiendo los pasos de Cristina Kirchner, que convocó a un comité de crisis para medir el impacto del desastre financiero internacional, Hugo Moyano armó esta tarde una cumbre sindical que giró en dos ejes fundamentales. Estos fueron medir el impacto de la fuerte devaluación brasileña en la actividad comercial del país y suspender hasta nuevo aviso los reclamos del refuerzo salarial de 500 pesos.
El vocero fue el secretario adjunto de la CGT, el metalúrgico Juan Belén. En su voz ratificó hoy que el reclamo de esa central sindical por el refuerzo de 500 pesos "pasa a un segundo plano", ante la crisis financiera internacional. "El reclamo por el refuerzo salarial "pasa a segundo plano (porque) todavía hay tiempo para eso" enfatizó Belén visiblemente preocupado por el problema financiero mundial.
En ese marco, el metalúrgico admitió que su gremio esta afectado por la crisis porque ya "tiene trabajadores suspendidos, recorte de jornadas y eliminación de horas extras" que según dijo "todavía no podemos cuantificar el alcance".
Pero no es el único. La caída del real transformó el mercado de Brasil en una seria competencia para el sector productivo nacional, antes alejado en precio con el país de Lula Da Silva. Así, el sector que mira con mayor preocupación la devaluación vecina es la industria textil.
Aunque no hablaron de una devaluación del peso argentino –al menos eso transmitieron los voceros a La Política Online- habrían coincido en una lectura del corto plazo con la Unión Industrial Argentina (UIA). Esto es, un plan de proteccionismo de la producción nacional para evitar la avalancha de productos brasileros que se traduzcan en alzas en los niveles de desocupación, suspensiones y menos ingresos a los trabajadores.
Incluso, la lectura que muchos especialistas de ambos sectores –enfrentados, claro, en el reclamo de los 500 pesos-, siguiendo la tónica que ayer lanzó el FMI, es que el índice de crecimiento estará por debajo del pautado por el gobierno de cara al 2009, y que incluso algunos temen un clima previo de recesión.
Congelan los 500
En rigor el pedido de un refuerzo no remunerativo para todos los trabajadores en relación de dependencia a fin de año, en los últimos días perdió el empuje con que se instalo luego del rechazo que generó desde el gobierno y sector empresario
En la víspera, el propio Moyano se encargó de desalentar al menos por ahora ese reclamo, al asegurar que "no es tiempo para hablar de aumentos" salariales postura mayoritariamente aceptada por la cúpula cegetista. No obstante el pedido no desapareció quedo latente y para ser tratado más adelante.
Esta tarde, el consejo directivo de la CGT que lidera Hugo Moyano se concentró en evaluar los alcances de la crisis financiera internacional y resolvió, elaborar una "serie propuestas" destinadas a "proteger la industria nacional, la producción y los puestos de empleo". "Se elaborará un documento que daremos a conocer el próximo martes", aseguraron a este medio.